5 señales que indican que una relación ha llegado a su fin

En el momento en que dejamos de amar a nuestra pareja y ya no toleramos sus hábitos o determinadas acciones, es mejor dar por terminada la relación para no prolongar el sufrimiento. ¿Cómo identificar estos indicios?
5 señales que indican que una relación ha llegado a su fin
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña.

Última actualización: 06 julio, 2023

En toda relación de pareja hay un inicio y un final, aunque esto último es algo que se suele evitar. Sin embargo, por mucho que queramos cerrar los ojos ante ello, ¿cuándo debemos, verdaderamente, cerrar el libro? ¿Sabemos cuándo una relación ha llegado a su fin?

Cuesta mucho admitir una relación debe terminar. Nos resulta tremendamente difícil porque tenemos miedo. No obstante, a veces, es lo mejor. Por eso, es importante identificar algunas señales que indican que no es posible volver atrás.

Señales de que una relación ha llegado a su fin

Existen varias señales que indican que una relación ha llegado a su fin. A continuación te comentaremos las principales para que las tengas en cuenta a la hora de decidir qué es lo mejor para ti y para esa persona con la que has compartido.

Ten en cuenta que una ruptura amorosa es un momento complicado, pero muy necesario a veces. Antes que vivir una mentira y alargar una relación que no está funcionado, es mejor sincerarse y pasar por este momento.

1. Sin amor no hay relación

Pareja distanciada en la cama.
Si ya no hay amor en la pareja, lo mejor es ponerle fin y avanzar.

La primera de las 5 señales que indican que una relación ha llegado a su fin es la falta de amor o cariño. Cuando no hay afecto, lo más sano es admitirlo y ponerle punto final a la relación para poder avanzar.

Con el tiempo, a veces el amor se “desgasta” o desaparece. Esto provoca que haya que replantearse la situación, porque la realidad es que una relación sin amor no existe. No hay que sentirse culpable por ello, sino asumirlo y buscar la forma de que ambos puedan avanzar, por caminos distintos.

A veces la rutina o, simplemente, el hecho de haber superado esa fase de enamoramiento inicial provoca que veamos con otros ojos a esa persona que un día amamos o creímos amar.

Entonces, cuando ya lo vemos todo más claro y somos conscientes de que no hay amor, es el momento de terminar la relación. Por el bien de ambos.

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2. La confianza es clave

Otra de las señales que indican que una relación ha llegado a su fin es la falta de confianza. Esto puede parecer obvio, pero en muchos casos puede llegar a obviarse, cuando se intenta “alargar” la relación para “recuperarla”.

Pero está claro que sin confianza es imposible establecer relaciones sanas. La sospecha y la incertidumbre generan un gran malestar y promueven un ambiente que no es grato para ninguno de los miembros de la pareja, algo sin duda muy incómodo.

Cuando la relación está llena de mentiras, desconfianzas, celos e infidelidades, esto provocará que la pareja se desestabilice y que las discusiones empiecen a aflorar cada dos por tres.

3. Ya no hay pareja como tal

A veces, no somos conscientes de que ya no hay una verdadera relación de pareja. Creemos que esto es algo que funciona por sí solo, sin ser conscientes de que requiere de compromiso, disposición y esfuerzo diario. 

Si tan solo una de las partes no pone interés en la relación, esto ya llevará a ambos miembros por el camino de la amargura. Además, el resentimiento puede aflorar y hacer aún más difícil mantener la relación.

Por lo tanto, la falta de interés de uno de los dos miembros de la pareja (o ambos, según sea el caso) es otra de las señales que indican que una relación ha llegado a su fin.

Hay señales o indicios que te ayudarán a abrir los ojos y te indicarán que lo más sano es ponerle punto final a esa relación que ya no va para adelante. ¡Atiéndelas!

4. Antes te atraía, ahora no lo toleras

Otra de las señales que indican que una relación ha llegado a su fin es que, lo que antes te atraía, ahora no lo toleras. Pueden ser detalles sencillos como el aroma de un perfume, el desorden, o cuestiones más complejas, como la relación entre la pareja y sus familiares o amigos.

En la fase de enamoramiento, nos sentimos tan dichosos y felices que tan solo vemos lo positivo y lo bueno de la persona que tenemos enfrente. Esto cambia cuando pasa el tiempo y todo aquello que antes te atraía (o aguantabas), ahora no lo soportas.

Esto puede provocar confusión en tu pareja, ya que lleva mucho tiempo sin cambiar ciertos hábitos que a ti te ponen los pelos de punta porque nunca te habías quejado. El problema es que ahora tienes que lidiar con ellos, pero no puedes; ahora los dos han llegado a un callejón sin salida.

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5. Diferencias irremediables

Cuando dos personas deciden unir sus vidas, deben compartir su visión del mundo, con las mismas metas, con un proyecto de vida en común y con valores similares. Pero, ¿qué ocurre cuándo algunas de estas cosas cambian?

Las personas podemos cambiar, así como nuestra percepción sobre el mundo y sobre las cosas. El problema es, que cuando esto provoca que ya no vayamos por el mismo camino que nuestra pareja, surgen los problemas. 

Cuando hay varias diferencias que ambos consideran irremediables, es el momento de que de replantearse la relación. No vale la pena que ambos se aten, si no van a ser felices.

Causas por las que la pasión acaba

La ruptura puede ser difícil, pero es necesaria

“Romper” es una palabra muy fuerte y muy dolorosa, puesto que, cuando iniciamos una relación, creemos que es para toda la vida. No obstante, es mejor terminar que ser necios y aguantar hasta que todo caiga por su propio peso.

Es importante que sepamos abrir los ojos ante la realidad, actuar como adultos e identificar las señales que indican que todo ya ha llegado a su final. Es algo natural, algo que suele suceder, así que no hay por qué resistirse. A veces, lo mejor es terminar y seguir adelante.


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