5 datos sobre los quistes ováricos que toda mujer debe saber

Aunque los quistes ováricos suelen aparecer durante la edad fértil, también se pueden presentar tras la menopausia y ser indicativos de cáncer, por lo que los chequeos médicos son fundamentales

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 25 mayo, 2023

Los quistes ováricos son una condición que puede afectar el aparato reproductor de la mujer. Se trata de una enfermedad benigna que se desarrolla en los ovarios y que puede presentar complicaciones cuando no se le prestan los cuidados adecuados.

Si bien, generalmente, no suponen un peligro real para la salud, es importante saber de qué se trata y cómo se debe actuar en caso de ser diagnosticada. A continuación, hemos querido recopilar los 5 datos más importantes sobre esta afección.

1. ¿Qué son los quistes ováricos?

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos define a los quistes ováricos como pequeñas bolsas llenas de líquido que se forman en los ovarios o sobre los mismos. Pueden llegar a medir desde milímetros a un poco más de cinco centímetros.

Cada vez que la mujer ovula, se forma un pequeño folículo en uno de sus ovarios que se rompe cuando el óvulo está maduro y listo para ser fecundado.

Si no ocurre el embarazo, el folículo se reabsorbe naturalmente. Sin embargo, si este proceso falla, la célula se enquista y da lugar a estos cuerpos extraños.

Las mujeres tienen riesgo de desarrollar esta condición tras llegar a la etapa de la pubertad y durante sus años fértiles. En general, los quistes ováricos suelen desaparecer con la llegada de la menopausia, pero hay casos de padecimiento en edades más avanzadas.

2. Factores relacionados y principales síntomas

Hasta el momento, no se conoce una causa que explique de manera fehaciente por qué se producen. No obstante, existen varios factores que se han relacionado con el riesgo de padecerlos.

Entre ellos, la página web de la Academia Americana de Médicos de Familia destaca los ciclos menstruales irregulares y el sometimiento a tratamientos de fertilidad. También, suelen relacionarse con determinados desajustes hormonales u otras cuestiones genéticas.

Tal y como ocurre con otras enfermedades del sistema reproductor, los síntomas pueden llegar a confundirse con los de otras afecciones más comunes.

El problema es que no suelen manifestarse de forma temprana y, generalmente, se tiende a ignorar el problema. Es importante acudir con regularidad al ginecólogo para evitar sorpresas.

Entre los principales síntomas, destacan las irregularidades en el periodo menstrual. También, puede desarrollarse dolor abdominal y pélvico que irradia a la espalda o piernas. Del mismo modo, se puede percibir:

• Dolor intenso durante el coito.
• Vómitos y náuseas.
• Sensibilidad en los tejidos mamarios.
• Sensación de pesadez y distensión abdominal.
• Presión en el recto y la vejiga.

3. ¿Cómo se detectan los quistes ováricos?

En caso de sospecha de quistes ováricos, se debe realizar un examen pélvico y comprobar a través de una ecografía o resonancia magnética su presencia. En caso de resultado positivo, la Office on Women’s Health recomienda la realización de un examen de sangre para determinar si estos deben ser removidos o no.

Respecto del tratamiento, por lo general, el ginecólogo puede aconsejar exámenes periódicos para determinar si los quistes ováricos pueden llegar a reabsorberse con el paso del tiempo.

En caso de que aumenten de tamaño, generen dolor o presenten otras complicaciones, puede ordenarse la toma de anticonceptivos o un procedimiento quirúrgico.

4. Los quistes y la fertilidad

Una de las preocupaciones que puede surgir al ser diagnosticada con quistes es la fertilidad. Por lo general, estos no suponen un riesgo para concebir pero, en algunos casos, pueden impedir que la ovulación se dé de forma correcta.

Por otro lado, el tamaño del quiste puede aumentar y alterar el funcionamiento de los ovarios o deformarlos. Esta situación podría comprometer en un futuro la fertilidad.

No son normales en la menopausia

Una mujer en la etapa de la menopausia tiene un riesgo menor de padecer quistes. No obstante, la detección de alguno podría suponer el desarrollo de otro tipo de problemas. Según los expertos de la Enciclopedia Médica citada anteriormente, los quistes en la menopausia podrían ser una señal de cáncer, aunque no es una sintomatología común.

5. Ovario Poliquístico (SOP)

La aparición de quistes en varias partes del ovario, una especie de racimos con 7 o 10 folículos, pasa a ser un trastorno conocido como Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP).

En este caso, sobre la base de los datos de MedlinePlus, podemos explicar que se producen a causa dedesequilibrios hormonales. En este caso, los quistes requieren más atención y cuidados pues están relacionados de forma directa con las alteraciones del periodo menstrual, la infertilidad o el exceso de vello corporal, entre otros.

En gran parte de los casos, los quistes no provocan alteraciones y desaparecen por sí mismos con el paso del tiempo. Pese a esto, es primordial someterse a chequeos médicos para estar seguras de que todo marcha bien.

Consulta con tu médico si tienes síntomas

En conclusión, la presencia de quistes ováricos es más habitual de lo que una podría esperar y no suele revertir gravedad. Sin embargo, si tienes síntomas compatibles con esta enfermedad, deberías acudir al médico.

Solo el especialista es capaz de diagnosticar la presencia de quistes y determinar el tratamiento más adecuado según tu edad, condición física y el tamaño de los mismos.