Hábitos que pueden dañar las articulaciones

Existen diversos hábitos que pueden dañar las articulaciones. ¿Los conoces? En caso de que no, descúbrelos a continuación.
Hábitos que pueden dañar las articulaciones
Carlos Fabián Avila

Revisado y aprobado por el médico Carlos Fabián Avila.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 04 marzo, 2024

Existen varios hábitos que pueden dañar las articulaciones. ¿Sabes cuáles pueden ser? Te damos una pista: todo en exceso es perjudicial para el cuerpo. 
Las articulaciones son partes fundamentales del cuerpo para poder realizar todo tipo de movimientos. Por lo tanto, es necesario brindarles los cuidados que requieren para que se encuentren en óptimas condiciones. ¡Conoce aquí qué podría llegar a dañarlas!

En el siguiente artículo, queremos dar a conocer algunos malos hábitos que pueden causar daños —en muchos casos hasta irreparables— en las articulaciones. Ten en cuenta, sin embargo, que si padeces dolor u otras molestias, lo ideal es consultar con un traumatólogo o fisioterapeuta para obtener un diagnóstico y tratamiento profesional.

La edad avanzada, un aspecto importante a considerar

Aunque no es un hábito, sino un factor, está relacionado con el daño en las articulaciones. Esto es porque la densidad ósea se va perdiendo con el paso de los años, como indica esta publicación médica especializada de Mayo Clinic.

En efecto, la edad conlleva pérdida progresiva de calcio y otros minerales esenciales para la salud de los huesos. Por eso, pueden aparecer algunas enfermedades degenerativas e irreversibles como la artritis y la osteoporosis.

Una mala alimentación

Comida chatarra.

Dentro de los hábitos que pueden dañar las articulaciones está una mala alimentación.

Un consumo elevado de alimentos ricos en grasas es una de las principales causas que provocan daño en el organismo, especialmente en los huesos. Porque puede promover déficit de nutrientes esenciales y además, otros problemas de salud, como la obesidad.

Como indica esta publicación del National Institute of Arthritis and MusculA.E. Nelson, Osteoarthritis el sobrepeso —inducido en parte por una alimentación incorrecta— es uno de los factores causantes de la osteoporosis.

Según esta misma fuente, las personas que consumen alcohol en exceso son propensas a tener problemas de obesidad y, por ende, problemas óseos.

Consumo de alcohol

Otro de los hábitos que pueden dañar las articulaciones es el consumo de alcohol.

Muchas bebidas alcohólicas (como la cerveza y el vino) causan inflamación y dolor en las articulaciones en personas intolerantes a la histamina, una sustancia que afecta a los tejidos blandos en dichas circunstancias.

Las bebidas alcohólicas, además de tener una gran cantidad de calorías, contienen un alto nivel de proteína de la histamina. Por ello, después de beber cerveza o vino, las personas pueden sentir dolor en las articulaciones.

Si bien lo ideal es prescindir del consumo de alcohol y mantener un estilo de vida sano, en caso de querer consumirlo ocasionalmente, lo más recomendable es mantener la moderación para que el proceso inflamatorio no sea tan molesto.

Consumo de tabaco

De acuerdo con los expertos de la American Academy of Orthopaedic Surgeons, el consumo de tabaco es otro de los hábitos que pueden dañar las articulaciones. No solo porque aumenta el riesgo de padecer osteoporosis, sino también porque:

  • Reduce el aporte de oxígeno a los huesos y tejidos del cuerpo.
  • Dificulta la cicatrización de heridas y consolidación de fracturas.
  • Perjudica la absorción del calcio de la dieta y descompone el estrógeno.
  • La nicotina ralentiza la producción de células formadoras de hueso (osteoblastos), y como resultado éstas generan menos hueso.

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Falta o exceso de ejercicio físico

Como te comentábamos al comienzo: todo en exceso es perjudicial. Y en lo que respecta a la actividad física, esto está muy claro. Tanto el exceso de actividad física como el sedentarismo conllevan riesgos para la salud y son hábitos que pueden dañar las articulaciones.

De acuerdo con las dos fuentes especializadas citadas previamente, la falta de ejercicio físico aumenta las probabilidades de sufrir enfermedades en los huesos y las articulaciones. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda hacer al menos 30 minutos de actividad física moderada al día.

Por el contrario, cuando se hace demasiado ejercicio —lo que se denomina sobreentrenamiento y ha sido descrito en estudios como este— o no se realiza el precalentamiento adecuado, puede provocarse daño, especialmente en las articulaciones del cuello, los tobillos y las rodillas.

Además, existen condiciones congénitas que pueden afectar de manera directa las articulaciones, como puede ser la asimetría. Otro problema que causa daños en las articulaciones es el pie plano, muy común en los niños, y que se puede corregir con facilidad si se detecta durante los primeros años de vida.

Recomendaciones especiales

Una de las claves es llevar una dieta equilibrada, libre de grasas dañinas y consumiendo frutas y verduras. Sin embargo, se suele recomendar preferir todos aquellos alimentos que aporten calcio y vitamina D.

Además, como mencionamos antes, es importante hacer ejercicio con cierta regularidad, aunque sean rutinas que no requieran demasiado esfuerzo, para no causar problemas en huesos ni articulaciones. En este sentido, un entrenador profesional o un fisioterapeuta pueden armar una rutina específica para tus necesidades.

Por otra parte, otro aspecto a tener en cuenta es dormir las horas adecuadas. El descanso es vital para muchos procesos del organismo, como es el caso del metabolismo de los nutrientes.

Una deficiencia en este proceso tan importante podría generar consecuencias en el peso de la persona, así como en su salud ósea, como se describe en este artículo de 2018.

Frutas para problemas en las articulaciones

Recuerda que siempre es recomendable pautar la dieta específica de cada persona con un nutricionista. Si cuentas con la aprobación del profesional, podrías añadir estos alimentos para ayudar a preservar la salud de tus huesos y articulaciones.

Las frutas tropicales.
Además de las frutas tropicales, que son ricas en varias vitaminas, existen otras opciones muy saludables.

Las cerezas

El dolor en las articulaciones lo pueden padecer todo tipo de personas, especialmente aquellas que tienen artritis.

Afortunadamente, las cerezas podrían ayudar a reducir el riesgo de padecer este tipo de enfermedades crónicas, según detallan publicaciones especializadas. Y según datos de la Fundación Española de la Nutrición, sería recomendable consumir esta fruta dentro de una dieta equilibrada porque aporta hidratos de carbono y –en pequeñas cantidades– vitamina C, tiamina, folatos y provitamina A.

La piña

La piña es una fruta que, por su alto contenido de agua y fibra, tiene propiedades diuréticas y depurativas. Por esto, según varias publicaciones, contribuye de manera natural a aliviar el dolor en las articulaciones, aunque ciertos estudios señalan que hacen falta más investigaciones para dar por hecho estos beneficios. De todos modos, anímate a incluirla en tu dieta diaria para contribuir en tratar y prevenir estas molestias.

Los expertos de la Fundación Española de la Nutrición indican que “consumida en fresco facilita la digestión gracias a su contenido en bromelina que es una enzima proteolítica que metaboliza las proteínas de los alimentos”.

Otras frutas que se podrían considerar el melón, la sandía, el pomelo y la naranja, que al tener también un alto contenido de agua, ayudan a promover la desinflamación.

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Recuerda…

Finalmente, recuerda que lo mejor es prevenir. Para ello, no hay que olvidar mantener una alimentación equilibrada y hacer ejercicio físico a diario, en su justa medida. Esto, en conjunto con las indicaciones específicas que te brinde el médico, evitará que las articulaciones pierdan elasticidad y sufran daños o desgaste con el pasar del tiempo.


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