Receta fácil y deliciosa del bizcocho cebra

Para conseguir el aspecto rayado es muy importante que intercalemos de forma homogénea las capas de vainilla y chocolate en el molde, hasta acabar con ambas mezclas
Receta fácil y deliciosa del bizcocho cebra

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 23 mayo, 2023

En esta oportunidad, haremos de la cocina un juego de creatividad con la elaboración del bizcocho cebra.

El bizcocho cebra es una opción rápida, diferente y económica. Además, es ideal para tener siempre en nuestra cocina una buena tarta para meriendas, desayuno o para matar esos antojitos que de vez en cuando nos dan a mitad del día.

Acompaña tu ración de bizcocho cebra con un vaso de leche, un delicioso y refrescante batido, una taza de café o de infusión.

¡A los niños les encantará acompañarnos a realizar esta deliciosa tarta!

El bizcocho cebra queda muy llamativo, con sus vetas de vainilla y cacao. Pero, ¿cómo logramos este efecto?

Todo es cuestión de técnica. La preparación es sencilla. Sin embargo, la concentración y cuidado en el detalle debemos guardarlos para el momento en que vertamos la mezcla en el molde. El resto del proceso es fácil.

Lo único que necesitas es tener los ingredientes y respetar las medidas para que te salga un postre perfecto para desayunos y meriendas.

Además, será un lujo verles las caras a los niños al momento de cortar las porciones y notar que su obra culinaria asemeja a las rayas de las cebras.

Comencemos por la descripción de los ingredientes que no son muchos y seguro que ya los tenemos en la despensa, aguardando a que nuestro ingenio culinario se manifieste.

¿Alguna vez te has preguntado cómo hacer un bizcocho cebra?

Chocolate

Ingredientes:

  • 175 gr de mantequilla o aceite de girasol
  • 250 gr de azúcar. Podemos sustituirla por edulcorante de estevia o miel. En ese caso, las medidas cambian.
  • 250 gr de harina repostera cernida.
  • 1 taza de leche.
  • 5 huevos
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • Cacao en polvo o 90 gr de chocolate negro
  • 1 cucharadita de polvo de hornear o leudante.

Todos nuestros ingredientes deben estar a temperatura ambiente.

De igual manera, intentaremos buscar sustitutos bajos en grasa y con alto contenido nutricional para que –despojándole de su mala fama- el bizcocho se constituya en una alternativa de merienda saludable para la familia.

Preparación:

Reducir-el-consumo-de-azucar
  • Primero, precalentamos el horno a 180ºC.
  • En un bol profundo, agregamos la mantequilla y comenzamos a batir hasta que el color de ésta aclare.
  • Después, agregamos el azúcar poco a poco y continuamos batiendo hasta lograr diluir los granos, cerca de 3 minutos.
  • Incorporamos una taza de leche líquida (o zumo de naranja) y, seguidamente, agregamos, una a una, las cinco yemas de huevos.
  • Luego, añadimos lentamente la harina para repostería, con una cucharadita de polvo de hornear.
  • ¿Y las claras de huevos? En otro recipiente junto con una pizca de sal, las batimos hasta formar picos, pero sin que pierdan su humedad. Por último, colocamos a nuestra mezcla del bizcocho de cebra, las claras de huevo batidas y la esencia de vainilla.
  • Después, separamos la mezcla en dos porciones iguales.
  • A una de las mezclas del bizcocho cebra, le agregamos tres cucharas rasas de cacao o el chocolate negro fundido al baño de maría.
  • En el centro de un molde previamente preparado, de aproximadamente 22 centímetros de diámetro, colocamos tres cucharadas de la mezcla de vainilla y sobre esta, la misma cantidad de la mezcla oscura de cacao. Seguimos alternando las mezclas hasta verterlas por completo en el molde.
  • Por último, llevamos al horno por 50 minutos o hasta que al hacer la prueba del palillo, este salga seco.

¿Viste qué sencillo es? Anímate a prepararlo en casa con tus propias variaciones.

Puedes agregar también un toque de licor a una de las mezclas, avena, frutos secos o yogur. En fin, lo que se te ocurra. Esta es una receta muy versátil.
¡Qué lo disfrutes!


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.