¿Cómo evitar la acidez estomacal o ardor?

Comer sano y practicar buenos hábitos ayuda, en gran medida, a prevenir molestias como la acidez o el ardor estomacal. Te contamos más
¿Cómo evitar la acidez estomacal o ardor?
Gilberto Adaulfo Sánchez Abreu

Revisado y aprobado por el médico Gilberto Adaulfo Sánchez Abreu.

Última actualización: 06 julio, 2023

Son diversas las medidas que podemos tomar para evitar la acidez estomacal o ardor, ya que hay diferentes motivos por los que suele ocurrir. Estos incluyen desde las comidas picantes o muy condimentadas, hasta las comidas copiosas, pasando por algunos medicamentos.

La sensación que provoca la acidez puede subir por el esófago hasta la garganta, dejándonos un gusto amargo o ácido. Este es el llamado reflujo gastroesofágico. La mayoría de las veces que sucede esto es atribuible al estilo de vida. Por eso, la primera recomendación del médico tiene que ver con moderar algunos hábitos. ¡Toma nota!

Cambios en el estilo de vida para evitar la acidez estomacal

La acidez se asocia a una mayor producción de ácido clorhídrico dentro del estómago, que en ocasiones se acompaña de reflujo. Este último fenómeno también se ve influenciado por la debilidad del esfínter esofágico interior o el aumento de presiones en la cavidad abdominal, como suele suceder en la obesidad.

Lo bueno es que existen muchas maneras de evitar esta desagradable situación e inclusive de eliminarla una vez empiecen a aparecer los síntomas. Te explicamos algunos consejos prácticos que puedes aplicar en cualquier momento en tu hogar.

Evitar ciertas bebidas y alimentos

Según una publicación en Farmacia Profesional, existen muchas sustancias que, cuando se incorporan en la dieta, son capaces de estimular la secreción ácida gástrica, el principal fenómeno responsable de la sensación de acidez.

Es el caso del café, la menta, las bebidas gaseosas, los alimentos cítricos (limón, naranja, mandarina, etc.), el chocolate, el tomate, algunos tipos de carnes, la cebolla, entre otros. Cada uno de ellos tiene diversos mecanismos que acaban en la estimulación de las células parietales del estómago, las responsables de la secreción de ácido clorhídrico.

Disminuir o evitar el tabaco y el alcohol

El consumo crónico de tabaco suele reconocerse como un factor de riesgo de numerosas condiciones, incluyendo las digestivas. Un estudio publicado en Gut explica que se ha asociado a este hábito con una cantidad de células parietales en la mucosa gástrica y, con ello, una mayor producción de ácido gástrico.

Algo similar ocurre con el alcohol. La cerveza y el vino son las bebidas que más se asocian a este efecto, mientras que el whisky y el coñac lo hacen en mucha menor medida. Así lo explica otra publicación en Gut. Uno de los mecanismos relacionados con el aumento de la acidez es la liberación de gastrina, una hormona vinculada a la estimulación de las células parietales.

Disminuir o evitar la exposición al tabaco o alcohol puede ser muy difícil, en especial en aquellos con un hábito muy acentuado. Por eso es necesario acudir con un especialista en salud mental en caso de que sea imposible alejarse de estos por cuenta propia.

Tratar el sobrepeso o la obesidad

Tanto el sobrepeso como la obesidad tienden a incrementar la presión existente en la cavidad abdominal. Cuando esto ocurre se favorece el paso de la secreción ácida gástrica hacia el esófago. La aparición del reflujo no necesariamente tiene que asociarse a un aumento de la secreción ácida gástrica, pero sí produce las mismas consecuencias de sensación de ardor a nivel del pecho y la garganta.

Cada caso es muy particular dependiendo del contexto. Sin embargo, una dieta balanceada y el ejercicio regular son los pilares para perder peso de forma saludable. Esto es más importante aún cuando hay condiciones metabólicas asociadas, como la diabetes mellitus.

Consumir alimentos, bebidas e infusiones beneficiosas

Hay algunas alternativas capaces de ayudar a mantener un pH estomacal menos agresivo. Es el caso de la papaya, el aloe vera (que en forma de gel podría ayudar a combatir el reflujo gastroesofágico) y la infusión de manzanilla. Todos estos pueden consumirse de forma regular para evitar los episodios de acidez estomacal e inclusive cuando ya se han presentado.

Otras formas de evitar la acidez estomacal o ardor

Los cambios en el estilo de vida son cruciales para combatir la acidez estomacal. Además de las recomendaciones antes mencionadas, te compartimos otras expuestas por American College of Gastroenterology:

  • Utilizar antiácidos de venta libre para los episodios puntuales de acidez estomacal. Si estos se vuelven recurrentes, se debe acudir al médico.
  • Tomar suficientes cantidades de agua.
  • Consumir pequeñas porciones de comida varias veces al día.
  • Masticar bien los alimentos y tragar despacio.
  • Ingerir un poco de bicarbonato de sodio diluido en agua podría ser una medida efectiva, según explican los expertos de la Canadian Society of Intestinal Research.

Si adicional a la acidez hay presencia de reflujo gastroesofágico, es recomendable elevar un poco la cabecera de la cama al momento de dormir, evitar llevar prendas de vestir muy apretadas en la zona abdominal y no comer unas dos o tres horas antes de acostarse (incluyendo las siestas). Todo esto es más relevante en el embarazo, ya que se favorece dicho fenómeno por el aumento de tamaño del útero.



¿Y si la molestia persiste?

Por lo general, para aliviar la acidez estomacal o ardor basta con aplicar algunos cambios en el estilo de vida y, sobre todo, en la alimentación; pero no hay que olvidar que cada persona es distinta.

Si persisten los síntomas o se agravan, lo mejor que puedes hacer es consultar a tu médico cuanto antes. Tienes que estar atento a estas señales:

  • Acidez estomacal o reflujo tres veces o más por semana.
  • Los síntomas se mantienen, pese a la medicación.
  • Dificultad para comer.
  • Náuseas o vómitos.
  • Pérdida de peso.

En estos casos es posible que el médico recomiende algunos exámenes (radiografía, endoscopia, entre otras), para determinar si son síntomas de alguna enfermedad, como gastritis crónica u otras.

La acidez estomacal o ardor es un problema frecuente e importante

A pesar de su frecuencia y aparente trivialidad, la excesiva acidez estomacal acompañada o no de reflujo debe tomarse en serio desde el momento en que se hace regular. Si no mejora con los cambios básicos en el estilo de vida que te hemos explicado, considera una consulta con tu médico de confianza lo antes posible.


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