10 tipos de fracturas que debes conocer

Una fractura es una pérdida de la continuidad normal de la sustancia ósea o cartilaginosa. Existen distintos tipos de fracturas, a continuación veremos las más frecuentes.
10 tipos de fracturas que debes conocer
Nelton Abdon Ramos Rojas

Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas.

Última actualización: 10 julio, 2023

Las fracturas representan la pérdida de continuidad normal de la sustancia ósea o cartilaginosa. Generalmente, son una de las posibles consecuencias de un accidente, resultados de golpes, fuerzas o tracciones cuyas intensidades superen la elasticidad del hueso.

Antes de continuar, es importante aclarar que el término fractura es extensivo para todo tipo de roturas de los huesos, desde aquellas en que el hueso se destruye y amplia evidentemente, hasta aquellas lesiones muy pequeñas e incluso microscópicas.

De entre los múltiples y diversos tipos destacan 10 fracturas, por ser las más habituales entre las tratadas por las instituciones de salud.

1. Fracturas del antebrazo (cúbito, radio o ambos)

Las fracturas de radio y cúbito se producen por un impacto directo al antebrazo. Su causa más frecuente son los accidentes, ya sean de tránsito, deportivos o por una caída de altura. Los síntomas que presentará el afectado serán:

  • Dolor.
  • Deformidad evidente.
  • Crépitos: (sonido anormal que se escucha cuando se auscultan los pulmones a través del tórax). Estos síntomas van acompañados de lesión neurológica (por lo que debes explorar nervio mediano, cubital y radial).

Si en la radiografía observamos una fractura no desplazada el tratamiento es conservador; si está desplazada el tratamiento será quirúrgico.

2. Fractura de húmero

Este tipo de fracturas son muy habituales en pediatría. Por lo general se deben a traumatismos indirectos por caída sobre la mano o bien a traumatismos directos asociados a lesión de partes blandas.

En pacientes con este tipo de fractura se observa:

  • Dolor.
  • Deformidad.
  • Crepitación.
  • Pérdida de la movilidad articular (esto último ligado a la severidad de la lesión).

La mayoría de este tipo de lesiones requieren fijación quirúrgica.

3. Fracturas de mano

Las fracturas de falanges suelen ser más frecuentes en niños. Son producidas por traumatismos directos en los dedos y traumatismos indirectos rotacionales. Estos traumatismos generan diversos tipos de fracturas (en ocasiones producto del atrapamiento de la mano).

Estos pacientes presentan deformidad, dolor y crepitación. En consecuencia, se debe prestar atención a las lesiones vásculo-nerviosas y tendinosas.

La mayoría de las fracturas falángicas pueden ser tratadas con medidas conservadoras empleando férulas digitales metálicas.

4. Fracturas de tibia y peroné

Las fracturas de tibia y peroné se producen por mecanismos indirectos o directos. Este mecanismo ocasiona fracturas transversas (el hueso se rompe perpendicularmente en su longitud) o conminutas (el hueso se fractura en dos o más fragmentos).

Los pacientes presentan dolor, deformidad, crepitación y disminución funcional.

  • Las fracturas de tibia pueden tratarse de manera conservadora mediante reducción y estabilización con yeso.
  • También pueden tratarse mediante estabilización quirúrgica con un clavo endomedular.

5. Fractura de clavícula

El mecanismo más frecuente que lesiona la clavícula es la caída con traumatismo directo sobre el hombro (frecuente en ciclistas). En estos pacientes, se observa una actitud antiálgica (un hombro está superior al otro) con el brazo lesionado pegado al cuerpo.

Además, entre los síntomas que presentan se pueden observar: deformidad, crepitación y dolor en el foco de la fractura.

El tratamiento consiste en soporte de hombro en cabestrillo o vendaje en 8 durante 4 semanas.

6. Fracturas de tobillo

fracturas

Las fracturas de esta región pueden clasificarse en fracturas del pilón tibial y bimaleolares, es decir, cuando se lesiona la tibia y el peroné distales. Estas fracturas están causadas por mecanismos de alto o bajo impacto, generalmente por fuerzas de desaceleración (como ocurre en una caída con rotación de la pierna, lesión deportiva o accidente automovilístico).

Los pacientes presentan: dolor, equimosis (hematomas), crepitaciones y deformidad, así como disminución de la movilidad. Asimismo, dependiendo de la gravedad de la lesión el tratamiento puede ser conservador o quirúrgico.

7. Fractura de metacarpo

Las fracturas de metacarpo son consecuencia de traumatismos en la mano, ya sea directos o indirectos con torsión. El patrón de la fractura dependerá del mecanismo de lesión. Estos pacientes presentan dolor, tumefacción, deformidad y crepitación.

La mayoría de los casos pueden tratarse adecuadamente con medidas conservadoras.

8. Fracturas de fémur

Los pacientes con fractura de cadera pueden tener también fracturas de fémur. Normalmente se presenta después de haber sufrido una caída o tropiezo, siendo las más frecuentes las del cuello del fémur y las pertrocantéreas. Dada su gravedad, el tratamiento en la mayoría de los casos es quirúrgico.

Los pacientes con este tipo de fractura presentan los siguientes síntomas:

  • Equimosis.
  • Espasmo muscular.
  • Dolor de rodilla o ingle.
  • Incapacidad para caminar.
  • Un acortamiento evidente y una rotación externa de la extremidad afectada.

9. Fracturas de radio

Las fracturas de la cabeza del radio son causadas por traumatismos indirectos al caer sobre la mano en extensión. Los pacientes presentan síntomas como: deformidad en dorso de tenedor o en bayoneta, crepitación, tumefacción y hematomas.

En estos casos, el tratamiento puede ser conservador o quirúrgico, dependiendo del tipo de fractura.

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10. Fracturas de nariz

La fractura de nariz es la fractura más común de la zona facial. Se trata de una rotura del hueso o cartílago sobre el puente nasal, en la pared lateral o también en el tabique (estructura que divide las fosas nasales de la nariz).

Los pacientes presentan los siguientes síntomas: inflamación, hematomas y además sangrado. El tratamiento puede ser conservador o también quirúrgico.

Para evitar cualquier tipo de complicación y si hay sospecha de fractura, se debería de acudir de inmediato al centro sanitario más cercano. De esta manera, se podrá corroborar y además solucionar la presente afección.


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