4 claves para superar un momento difícil
Una ruptura de pareja, la muerte de un familiar, que te despidan del trabajo… todas ellas son circunstancias complicadas que nos llegan de manera sorpresiva e inesperada. Por eso, tener claras algunas claves para superar un momento difícil puede ayudar si algo así nos sucede.
Las emociones son lo más complicado de gestionar en este tipo de circunstancias. Nos sentimos tan mal, tan tristes y tan desesperanzados que creemos que el mundo está contra nosotros. Sin embargo, podemos intentar ver algo de luz aun cuando todo se haya venido abajo.
Profundicemos.
4 claves para superar un momento difícil
1. Acepta lo sucedido
Este es un primer paso muy importante para superar un momento difícil. Está claro que estás triste, te encuentras mal y piensas que no te merecías lo que te ha pasado. No obstante, acepta lo que ha ocurrido.
Negar la situación, enfadarte e ir en contra de aquello que ya se ha hecho presente no servirá de nada. Solo cuando aceptes lo sucedido podrás empezar a dar pasos hacia adelante para poder seguir con tu vida. Pongamos un sencillo ejemplo.
Tu pareja te deja, pero tú te niegas a esta realidad. Es muy posible que estés triste e intentes recuperar la relación, pero tu ex toma cartas en el asunto y te pide que no insistas.
En esta situación, posiblemente pases horas dando vueltas a la idea de que has hecho algo mal y eres el causante de todas tus desgracias. Sin embargo, debes saber que a veces, simplemente, el amor se va.
No es culpa de nadie. Por ello, lo mejor es tratar de entender y enfrentar la situación, aunque te duela. Es el comienzo de un proceso de duelo que te permitirá volver a estar bien en un tiempo.
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2. Sigue haciendo cosas
Muchas personas, cuando tienen que superar un momento difícil, se encierran en sí mismas y dejan de hacer todo aquello que les emocionaba y les llenaba. Es como si una parte de ellas estuviese en pausa.
Es natural y normal que pasemos unos días mal y que nos refugiemos en nuestra tristeza. Sin embargo, si esto se extiende durante semanas, meses o incluso años, tenemos que buscar ayuda con urgencia.
No te encierres en casa, no interrumpas tus paseos, no dejes de ir al gimnasio. Si todo esto te hacía feliz, no dejes de realizarlo. Te encuentras mal, sí, pero la vida sigue. En cuanto vuelvas a hacer lo que te gusta, te darás cuenta de algo que no has sido capaz de ver hasta el momento: hay esperanza.
3. No te alejes de los demás
Esto es algo muy importante y es que alejarse de las demás personas, dejar de quedar con los amigos, ver menos a la familia e intentar salir de casa lo menos posible para no interactuar con la gente no es beneficioso. Todo lo contrario. Te va a perjudicar.
El contacto con los demás te hará sentir que no estás solo en el mundo. Asimismo, hablar con tus seres queridos podrá ayudarte a pasar por el bache y te permitirá desahogarte.
Esto, también, les permitirá a los demás brindarte palabras de aliento, darte todo su apoyo y que tú puedas ver las cosas con mayor perspectiva. Conseguir esto te ayudará a seguir adelante con tu vida.
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4. Todo termina pasando
Aunque parezca contraproducente, puede servirte de ayuda para superar un momento difícil recordar una mala época del pasado. Por ejemplo, alguna ruptura anterior, la pérdida de un trabajo o la muerte de un familiar.
¿Verdad que en su momento estuviste mal, pero que después conseguiste continuar con tu vida? ¿no es cierto que el tiempo te ayudó a sanar? En el momento en el que todo se te viene encima, parece que no hay salida. Sin embargo, esta sensación no es real.
De la misma forma, consulta con un psicólogo si así lo consideras.
No te rindas
Por este motivo, no te aísles, no te aferres a ese dolor que ahora te mantiene atrapado. Para superar un momento difícil, ten en cuenta las claves mencionadas y descubrirás que eres capaz de seguir adelante, aunque ahora nada parezca darte indicios de ello.
Los momentos difíciles pueden ayudarnos a hacer un parón para revisar si estamos recorriendo el camino adecuado en nuestra vida. También, nos pueden ayudar a hacernos más fuertes, a revisar nuestras carencias, a aumentar nuestra asertividad o nuestra autoestima.
Son una oportunidad para conocernos mejor y para que nos hagamos conscientes de que, pase lo que pase, la vida sigue.
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