5 tipos de orgasmos femeninos y cómo alcanzarlos

La mujer puede disfrutar de diferentes tipos de orgasmos según la zona que se estimule. Vamos a conocer algunos de ellos.

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña.

Escrito por Okairy Zuñiga

Última actualización: 26 julio, 2023

La sexualidad femenina es más compleja que la de los hombres, tal vez mucho más de lo que algunos piensan. Por lo general, una mujer necesita de mucha estimulación para excitarse y alcanzar orgasmos. Se ha observado que existen diferentes tipos de orgasmos femeninos al estimular ciertas partes de su cuerpo. A continuación te comentamos cuáles son algunos de ellos y algunas reflexiones interesantes.

Muchas parejas deciden experimentar con juegos sexuales y también con formas de exploración individual para conocerse mejor y conseguir una experiencia satisfactoria. Pese a los avances, el orgasmo femenino sigue siendo un tabú. Además de enseñarte algunas de las formas en la que este se puede presentar, nuestra intención también es destruir falsas creencias, mitos y estigmas al momento de hablar de la sexualidad de las mujeres.

¿Qué es el orgasmo?

Antes de explorar los tipos de orgasmos femeninos, primero debemos esclarecer qué es exactamente un orgasmo. La Enciclopedia Británica lo define como el estado fisiológico de mayor excitación sexual que se caracteriza por la relajación de las tensiones sexuales y los músculos del cuerpo.

En efecto, y al menos es así en la mayoría de los casos, para llegar a él se requiere de la estimulación rítmica de diferentes partes del cuerpo en conjunto con altas concentraciones de receptores sensoriales. Tanto el orgasmo femenino como el masculino son la cumbre del placer y la excitación sexual, y durante el proceso aumenta la frecuencia cardíaca, la presión arterial y se desencadenan espasmos y contracciones en los músculos pélvicos y la uretra.

¿Existen diferentes tipos de orgasmos femeninos?

La naturaleza del orgasmo femenino ha originado desde siempre intensos debates. También, la existen de varios tipos de orgasmos en las mujeres. Durante mucho tiempo se pensó que solo existía un tipo de orgasmo, aunque hoy sabemos que en la práctica hay diferentes formas en las que el clímax sexual se puede alcanzar y manifestar.

Tal y como advierte un trabajo divulgado en Hormones and Behavior, las mujeres experimentan el orgasmo a través de la estimulación directa o indirecta del clítoris, la estimulación vaginal o de las áreas internas que rodean la vagina. Algunas llegan a él solo por medio de las relaciones sexuales, otras solo a través de la autoestimulación y algunas mujeres nunca lo experimentan bajo ninguna condición.

Esta disparidad de experiencias dificulta catalogar de forma cerrada el placer femenino, aunque de lo que no hay dudas es que existen diferentes formas de llegar a él. En general, la mayoría de los orgasmos en las mujeres ocurren a través de la acción sinérgica de múltiples órganos y tejidos localizados. La vagina, la vulva, el clítoris, la uretra, los senos y demás son algunos de ellos.

También es importante matizar la forma en la que se pueden agrupar los tipos de orgasmos femeninos. Por ejemplo, si se hace por el lugar de la estimulación o por su intensidad. A propósito de eso último, con frecuencia las mujeres describen sus experiencias en razón de la intensidad (buenos y malos, y todas sus variantes). Sin embargo, para el propósito de este artículo, nos centraremos en aquellos que se pueden manifestar tras una acción en específica.

5 tipos de orgasmos en las mujeres

Sin mayores rodeos, ya es momento de describir los tipos de orgasmos femeninos y cómo alcanzarlos. Bajo las limitaciones y las consideraciones dadas, destacamos los siguientes.

1. El orgasmo en el clítoris

También conocido como orgasmo clitoriano, se manifiesta tras la estimulación directa o indirecta del clítoris. La mayoría de las mujeres informan orgasmos más rápidos e intensos cuando media esto último, hasta el punto que muchas lo consideran como «el orgasmo verdadero».

Se estima que el clítoris reúne más de 10 000 terminaciones nerviosas, lo que lo convierte en una zona con una alta sensibilidad frente a la estimulación. No existe una única forma de hacerlo, ya que tanto su estimulación directa o indirecta son efectivas según las preferencias y las variantes anatómicas del órgano. Ten presente los siguientes consejos:

• Una de las formas más prácticas de conocer la intensidad, el ritmo y el grado de estimulación del clítoris que lleve al orgasmo es a través de la masturbación. En efecto, por medio de ella descubrirás qué te gusta y qué no cuando se trata alcanzar la excitación por esta vía.
• En general, los estímulos indirectos deben priorizar a los directos durante el inicio. Poco a poco, y según tus gustos, puedes intentar con ritmos y movimientos más directos.
• Varía los niveles de presión, también con los ángulos y con la velocidad.
• El consejo anterior aplica también durante las relaciones sexuales o durante el uso de juguetes sexuales.

2. El orgasmo vaginal

Como ya indicamos, durante siglos fue el único orgasmo reconocido en las mujeres. Por paradógico que suene, para la mayoría de ellas es el más difícil de alcanzar por sí solo. La estimulación se hace en el llamado complejo clitouretrovaginal, una zona donde en teoría convergen el clítoris, la uretra y la vagina. En la cultura popular, es el llamado punto G o punto Gräfenberg.

Dejando a un lado las polémicas, se piensa que el área de mayor estimulación se encuentra en la pared frontal de la vagina. No hay nada escrito al respecto, de manera que debes probar en qué área sientes mayor placer si lo que deseas es un orgasmo intenso. Los siguientes consejos pueden ser útiles:

• Explora diferentes posiciones sexuales hasta encontrar aquella que te genera más excitación.
• Prueba con diferentes ángulos, velocidades y ritmos. Hazlo tanto en la relación sexual con penetración como con la autoestimulación.
• Durante el proceso se deben estimular otras áreas, ello con la intención de magnificar el placer.

Se estima que solo el 6 % de las mujeres tienen orgasmos recurrentes a través de la penetración vaginal (sin ningún otro estímulo). De nuevo, se trata de explorar sobre qué cosas te funcionan mejor para aprovecharlas.

3. El orgasmo mixto o combinado

Recibe el nombre de orgasmo mixto o combinado aquel que se logra a través de la estimulación dual de la vagina y el clítoris. En realidad, la mayoría de los orgasmos son de este tipo; y buena parte de las mujeres coinciden en que es el más placentero. Después de todo, estimular dos zonas erógenas al mismo tiempo, en lugar de una, se traduce en una mayor excitación fisiológica y psicológica.

Son muchas las mujeres que no saben que el clítoris tiene ramificaciones alrededor de la vulva y dentro de la vagina, por lo que se pueden estimular ambos al mismo tiempo. Se puede lograr a través del coito, la masturbación o el uso de juguetes sexuales. Solo debes unir los consejos que te hemos dado para cada caso.

4. El orgasmo anal

El orgasmo anal forma parte de la categoría orgasmos no genitales (non-genital orgasms), un terreno amplio y variado de formas de lograr el placer a través de la estimulación. El ano reúne una concentración alta de terminaciones nerviosas, tanto así que para muchos hombres y mujeres se considera una zona erógena.

Los gustos determinan en buena medida el placer que se obtiene por esta vía, de manera que no se debe experimentar coacción interna o externa por explorarlo. Su estimulación puede ser directa, como lo es el sexo anal; o indirecta o superficial, como puede ser el sexo oral en esta zona. Al momento de intentar un orgasmo anal se puede considerar lo siguiente:

• Tanto si deseas probar la estimulación directa o indirecta, la premisa base es hacerlo de forma progresiva. Un estímulo muy rápido o intenso puede resultar muy agresivo y desvanecer el interés o el placer.
• Considera el uso de lubricantes si apuestas por el sexo anal.
• Busca posiciones sexuales en las que puedas controlar el grado de penetración de forma activa. Así puedes ajustarlo a tus sensaciones.

Como en otros casos, lo mejor es optar por una estimulación mixta; de manera que no se dejen a un lado el clítoris, la vulva, la vagina, los senos y otras áreas que permitan magnificar la excitación. La relajación y la apertura voluntaria a la experiencia son claves para este y otros tipos de orgasmos femeninos.

5. Orgasmo inducido por el ejercicio

También se denomina coregasm, y al parecer es una experiencia más común de lo que se piensa. De acuerdo con un estudio publicado en Sexual and Relationship Therapy, se desencadena en especial luego de rutinas de ejercicios abdominales, escalada y levantamiento de pesas. Sin embargo, la mayoría de los ejercicios que involucran en core lo pueden desatar.

El clímax por esta vía es de menor intensidad que el logrado a través de las anteriores. De hecho, para un número no desdeñable de mujeres, puede ser una experiencia molesta o confusa. No hay una forma real de evitarlos, en parte porque están disociados de los pensamientos relacionados con el sexo o el nivel de excitación.

Otros tipos de orgasmos en las mujeres

Aunque los tipos de orgasmos femeninos descritos son los más comunes, en la práctica se pueden contabilizar muchos más. El placer y la excitación sexual son experiencias que reúnen un espectro muy amplio, de manera que los modos de lograr el orgasmo también lo son.

También hay que destacar que, para algunas mujeres, la experiencia del orgasmo puede ser voluntaria o involuntaria. Por ejemplo, y como se recoge en Sexual Medicine, es posible entrenar la capacidad de tener orgasmos sin ningún tipo de estimulación. Esto es, desencadenar y controlar la duración de un orgasmo solo con la concentración. Se tratan de episodios aislados, pero posibles.

Por otra parte, y al igual que sucede con los hombres, las mujeres pueden tener los llamados sueños húmedos. De acuerdo con la International Society for Sexual Medicine (ISSM), los sueños sexuales pueden conducir a la lubricación vaginal y orgasmos nocturnos mientras se duerme. Son más comunes durante la adolescencia, pero también pueden ocurrir en la adultez.

Determinantes de los orgasmos sexuales femeninos

En primer lugar, y siguiendo a un trabajo divulgado en Socioaffective Neuroscience & Psychology, el orgasmo femenino, con independencia de su tipo, se logra a través de una suma de factores. El contexto, las posiciones corporales, el ritmo y el movimiento, la pareja (cuando la hay), los aspectos sensoriales y demás median en la intensidad del placer durante el clímax.

Así, el que un orgasmo sea «bueno», «malo», «intenso», «profundo» u otras etiquetas que se le puedan dar no dependen en exclusiva de la estimulación focalizada. Si se desea disfrutar del orgasmo, entonces, se deben considerar el placer y la excitación como un todo en lugar de como algo particular o individual. Esto aplica en especial durante el sexo por penetración.

De igual modo, la apertura psicológica o emocional a la experiencia también es determinante. La cultura, la religión, la educación y demás pueden impedir disfrutar de la sexualidad. Otras variantes como la edad, la condición física y el estado de salud, también. Frente a todo esto, se deben buscar mecanismos que permitan abrirle la puerta al placer y con ello a los beneficios que tiene en el plano físico y emocional.

El orgasmo femenino: una experiencia heterogénea

No hay dos orgasmos femeninos iguales, así como tampoco las vías para llegar a él. Lo que desencadena el placer y el clímax difiere debido a múltiples factores, de manera que la experiencia es muy personal. La mejor forma de descubrir qué tipo de orgasmos resulta más placentero es experimentado, ya sea con la pareja o en solitario. No dejes de hacerlo para que disfrutes de tu sexualidad.