5 trucos para potenciar el deseo sexual

Cuando una persona no tiene deseo sexual, no debe tomarse como algo normal; ya que tener relaciones es parte de vivir y, sobre todo, de sentir placer.

Revisado y aprobado por la filósofa Isbelia Esther Farías López.

Escrito por Isbelia Esther Farías López

Última actualización: 25 enero, 2022

¿Has escuchado hablar sobre los sentimientos sexuales? En realidad, estos son parte de la vida cotidiana. Y para potenciar el deseo sexual se requiere también de otros factores: atracción y amor. Está claro que cada uno tiene un significado; sin embargo, en cuestiones de sexo, van juntos:

• Deseo: es el anhelo que impulsa a interactuar. No solo se trata de algo psicológico; ya que después de la adolescencia o al presentarse un cambio hormonal, aumenta.
• Atracción: una vez que tienes la necesidad, entonces se presenta esa fuerza que te atrae de forma inexplicable.
• Amor: es en esta fase en la que dichos términos se unen. Es decir, te enamoras cuando deseas y sientes atracción por una sola persona.

¿Quieres aprender a aumentar cada parte? Te damos 5 trucos. ¡Apunta!

¿Qué es el deseo sexual?

También llamado el motor de la sexualidad. De manera coloquial, son esas ganas de estar con otra persona a nivel sexual.

Sin embargo, el error que se suele cometer es igualar el deseo sexual con la excitación. Esta última es una reacción fisiológica, es decir, las personas saben que están excitadas cuando tienen una erección o lubrican.  

Por su parte, el deseo es solo la fuerza que ayuda a buscar el placer. De ahí que a veces pueda haber deseo pero, cuando llega el momento, hay un bloqueo en la excitación sexual.

¿Por qué no logro la excitación sexual?

En algunos casos, según explica un artículo publicado por la Revista Internacional de Psicoanálisis Aperturas, son los pensamientos los que no dejan fluir durante el acto. Tales como:

• Miedo: no quieres hacer el ridículo, temes el rechazo por mostrar el cuerpo.
• Ansiedad: te preocupas de lo que pasará al llegar al orgasmo, por lo que no lo permites. 
• Estrés: es el enemigo de las actividades humanas. Por supuesto, las tensiones también bloquean el desempeño sexual.
• Prejuicios: es más difícil desaprender que aprender. La sociedad está llena de prohibiciones que generan culpabilidad.

• Comunicación: este elemento no puede faltar en la relación. Es la única manera de expresar lo que de verdad te gusta.  
• Pasión: en este caso, no solo se trata del instinto carnal. El hecho de llevar una actitud de derrota en la vida no te permite disfrutar con libertad.
• Ignorancia: no hay nada mejor que descubrir de lo que es capaz el cuerpo humano. En ocasiones, no te atreves porque temes sufrir un daño físico. Pero mientras estés informado, nada te tomará por sorpresa. 
• Fármacos: llevar un tratamiento con antidepresivos o medicamentos para la presión causa efectos secundarios. Entre ellos, se encuentra la disminución del apetito sexual.

¿La ausencia de deseo sexual tiene solución?

Por fortuna, aumentar el deseo sexual es posible, tanto si eres hombre como mujer. Tener relaciones sexuales está en el instinto, pero a veces hay que trabajar hasta superar el problema. Pon atención en los siguientes trucos:

1. Contacto físico

Alejarse de la pareja se inicia con un simple descanso. Ambos buscan tomarse un tiempo, pero no dicen nada; solo se apartan. Esto provoca que el contacto físico desaparezca.

¿Hace cuánto tiempo no se toman de la mano? Las caricias, abrazos y besos quedaron en el olvido. Y, mientras no se recuperen, el acto sexual seguirá esperando.

2. No temer al juego erótico

En realidad, tener una noche satisfactoria en la intimidad no es tan complicado; tal y como se recoge en un estudio publicado por la Revista de terapia sexual y marital.

No se trata de utilizar juegos eróticos o poner en práctica fetiches en los que no encajas, l a clave está en pedir lo que deseas. Teniendo en cuenta también, por supuesto, los deseos del otro.

3. Cambiar escenarios

¿Cuándo fue la última vez que se rompió la rutina? Quizás la costumbre de las jornadas aceleradas, cumpliendo reglas y horarios, ha derivado en una vida sexual aburrida y monótona.  

Por este motivo, dedícate un tiempo a cambiar los espacios y provocar curiosidad en cada encuentro.

4. Frases estimulantes

En este punto, se toman en cuenta aspectos como los valores y las personalidades de ambos con el fin de no herir susceptibilidades. Es decir, no se trata de utilizar un lenguaje grosero para estimular la libido. Hay que conocerse como pareja y ver hasta dónde se puede llegar.

5. Quererte

No cualquiera tiene la valentía de quererse y aceptarse. Como bien argumenta Alejandra Echeverría-Lozano, de la Universidad Nacional Autónoma de México: de nada te sirven los pasos anteriores si no tienes amor propio. 

Una persona segura será deseada y no tendrá pudor a la hora de intimar. Así que es tiempo de conocerte de pies a cabeza. Tener en cuenta las propias emociones y el estado físico. ¿Qué es lo que te apetece? ¿Hay algo que aborreces? 

Aviva el fuego del deseo sexual en la relación

Intenta mantener una actitud positiva y enérgica pero, sobre todo, mantén la mente abierta. No olvides que en la cama no hay límites, hasta que uno de los dos no esté de acuerdo.

Asimismo, cuidar la salud es un requisito indispensable. No se trata solo de llevar una dieta balanceada, sino también de realizar actividad física. Y no lo olvides… ¡Cuida la apariencia! Es una manera de mostrarle al otro cuánto te quieres y despertar así sus fantasías.