8 razones para amar el baile y practicarlo todos los días

Son diversas las razones para amar el baile. Hay quienes valoran más el estilo musical o lo hacen sobre todo por motivos sociales. Descubre algunos de sus beneficios.
8 razones para amar el baile y practicarlo todos los días

Última actualización: 06 julio, 2023

Entre las razones para amar el baile destaca el placer que se siente al dejarse contagiar por los ritmos alegres que invitan a moverse solo, en pareja e, incluso, en grupo.
Desde la antigüedad esta actividad se ha practicado para realizar rituales, celebrar eventos o expresar sentimientos. De hecho, en la actualidad hay a quienes les resulta más fácil hacer ejercicio al son de la música que con las máquinas del gimnasio.

Por ello, a día de hoy el baile se considera como una disciplina deportiva que aporta diversos beneficios para la salud. A continuación te contamos cuáles son algunos de estos motivos que pueden animarte a probarlo si no lo has hecho ya.

¿Cuáles son estas 8 razones para amar el baile?

Lo mejor de todo es que no hay un límite de edad. Además, se trata de un ejercicio flexible, con posibilidades para ser incluido en la rutina diaria y adaptarse a diferentes gustos personales, estados de forma física y espacios disponibles.

Así, te presentamos 8 buenas razones para amar el baile y practicarlo con más regularidad. ¡Te sorprenderás!

1. Fortalece los músculos

Fortalece los músculos

Bailes como el ballet, la salsa o la bachata ayudan a tonificar las piernas de forma general. Por su parte, el flamenco involucra a su vez a los brazos.

Es decir, esta actividad requiere el trabajo de determinados grupos musculares que se fortalecen por los movimientos repetitivos. Esto significa que, con la práctica regular, se puede aumentar la resistencia física sin padecer fatiga u otros efectos no deseados.

Por ejemplo, un estudio realizado por científicos de la Universidad de Khon Kaen (Tailandia) encuentra resultados en esta dirección al aplicar un programa de baile de 3 sesiones semanales de 40 minutos durante un mes y medio.

2. Ayuda a bajar de peso: otra de las razones para amar el baile

El baile ayuda a bajar de peso

Cuánto más rápido y alegre sea el ritmo de la danza, mayor será el gasto calórico. Además, como indican los autores de la investigación que hemos citado en el apartado anterior, una rutina de 40 minutos realizada al menos 3 veces a la semana nos hace mantener el cuerpo en forma.

Por tanto, si deseas bajar de peso, el baile representa una interesante alternativa para moverse y aumentar la actividad física diaria.

3. Mejora la salud cardiovascular

Como otros tipos de ejercicio físico, el baile contribuye a evitar riesgos a nivel cardiovascular. En este sentido, una revisión publicada en 2009 en la revista Journal of Aging and Physical Activity señala esta ventaja como uno de los hallazgos habituales al aplicar el baile a población adulta.

4. Incrementa la flexibilidad, la agilidad y la coordinación

Incrementa la flexibilidad

Los movimientos que se hacen al bailar ayudan a potenciar la flexibilidad, la agilidad y la coordinación. De hecho, el trabajo al que hemos aludido en el párrafo previo también obtiene que con este ejercicio es posible reducir el número de caídas en personas mayores.

5. Más razones para amar el baile: fortalece los huesos

Bailar con regularidad podría, además, reforzar la densidad ósea, la cual suele disminuir en las mujeres cuando les llega la menopausia (cese de la menstruación). Así lo señala igualmente la revisión sistemática a la que venimos haciendo referencia.

Visita este artículo: Por qué nos gusta tanto bailar…

6. Mejora el funcionamiento cognitivo

El baile combina la actividad física con el aprendizaje de complejas secuencias de pasos y movimientos que han de realizarse al ritmo de la música. Por ello, existe evidencia que demuestra que se trata de un ejercicio adecuado para prevenir el deterioro y entrenar diversas habilidades cognitivas.

Así, un estudio realizado por el doctor José Manuel Cimadevilla y su equipo encuentra que bailar se relaciona con un mejor rendimiento en tareas que implican a las funciones ejecutivas (planificación, flexibilidad mental, inhibición, etc.) y la memoria espacial.

7. Proporciona sensación de bienestar

Proporciona sensación de bienestar

Como subconjunto de actividad física, el baile podría equilibrar los niveles de algunos neurotransmisores que se vinculan a un talante emocional óptimo.

En esta línea, un trabajo publicado en 2017 en la revista Neuroscience & Biobehavioral Reviews señala el rol que juega el ejercicio sobre la liberación de serotonina. Este resultado es relevante dado que dicha hormona favorece un estado de ánimo más positivo y, por tanto, una mayor sensación de bienestar.

8. Refuerza la autoestima: son también razones para amar el baile

El baile es también una forma de expresar los sentimientos y la propia personalidad. Además, nos permite conectar con el cuerpo de un modo distinto, ayudándonos a superar algunas inseguridades y a conocernos a nosotros mismos.

Por ello, como apunta una revisión de la profesora Tina M. Schwender y colaboradores, se trata de una actividad que podría mejorar el autoconcepto y favorecer a su vez la autoestima de quien lo practica. No obstante, como asimismo indican estos autores, es necesaria más investigación al respecto.

¿Preparados para empezar a bailar?

Como vemos, el baile se presenta como una opción divertida con la que trabajar y moldear el cuerpo. Además, los beneficios que aporta se dan tanto en el plano físico como en el psicológico.

Si te animas a probarlo varias veces a la semana, quizás lo acabes incorporando a tu rutina cotidiana… ¡Ya nos contarás!


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Assunção Júnior, J. C., de Almeida Silva, H. J., da Silva, J. F. C., da Silva Cruz, R., de Almeida Lins, C. A., & de Souza, M. C. (2018). Zumba dancing can improve the pain and functional capacity in women with fibromyalgia. Journal of Bodywork and Movement Therapies, 22(2), 455–459. https://doi.org/10.1016/j.jbmt.2017.09.022
  • Keogh, J. W. L., Kilding, A., Pidgeon, P., Ashley, L., & Gillis, D. (2009). Physical Benefits of Dancing for Healthy Older Adults: A Review. Journal of Aging and Physical Activity, 17(4), 479–500. https://doi.org/10.1123/japa.17.4.479
  • Kraus, C., Castrén, E., Kasper, S. y Lanzenberger, R. (2017). Serotonin and neuroplasticity – Links between molecular, functional and structural pathophysiology in depression. Neuroscience & Biobehavioral Reviews, 77, 317–326. https://doi.org/10.1016/j.neubiorev.2017.03.007
  • Noguera, C., Carmona, D., Rueda, A., Fernández, R., & Cimadevilla, J. M. (2020). Shall We Dance? Dancing Modulates Executive Functions and Spatial Memory. International Journal of Environmental Research and Public Health, 17(6), 1960. https://doi.org/10.3390/ijerph17061960
  • Rehfeld, K., Müller, P., Aye, N., Schmicker, M., Dordevic, M., Kaufmann, J., Hökelmann, A., & Müller, N. G. (2017). Dancing or Fitness Sport? The Effects of Two Training Programs on Hippocampal Plasticity and Balance Abilities in Healthy Seniors. Frontiers in Human Neuroscience11, 305. https://doi.org/10.3389/fnhum.2017.00305
  • Schwender, T. M., Spengler, S., Oedl, C., & Mess, F. (2018). Effects of Dance Interventions on Aspects of the Participants' Self: A Systematic Review. Frontiers in Psychology9, 1130. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2018.01130
  • Zhu, Y., Wu, H., Qi, M., Wang, S., Zhang, Q., Zhou, L., Wang, S., Wang, W., Wu, T., Xiao, M., Yang, S., Chen, H., Zhang, L., Zhang, K. C., Ma, J., & Wang, T. (2018). Effects of a specially designed aerobic dance routine on mild cognitive impairment. Clinical Interventions in Aging13, 1691–1700. https://doi.org/10.2147/CIA.S163067

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.