¿Por qué algunas personas engordan más rápido que otras?
Seguro que has observado que algunas personas comen más que otras y no engordan o que, comiendo lo mismo, no lo hacen con la misma velocidad ni la misma cantidad de peso. Cada cuerpo es distinto y eso puede influir en la capacidad de un individuo de ganar kilos en forma de peso graso.
No obstante es posible que tengas ciertas dudas al respecto. En esta entrada te queremos hablar de los motivos por los que se pueden dar estos fenómenos tan comunes. ¡Descubre cuáles son!
1. La genética
La genética es una de las causantes de este problema. Algunas personas engordan más que otras debido a factores relacionados con el genoma. Y es que los genes determinan varios puntos cruciales que luego serán clave en la vida. Además, también influyen a la hora de ver lo difícil o fácil que será para el cuerpo engordar.
- En la actualidad esto es un hecho contrastado, ya que los expertos en el genoma humano han logrado separar los genes que se encargan de realizar, por un lado, la distribución y, por otro lado, la acumulación de la grasa. Estos han sido plasmados en un artículo publicado en la revista Preventive Nutrition and Food Science.
- En el caso de los hombres, el gen FTO (asociado con la masa grasa y la obesidad) se encuentra en el 82% de ellos, lo que significa que tendrían una mayor tendencia a subir de peso por poco que comieran.
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2. La alimentación
Si el componente genético resulta fundamental, no lo es menos el de la alimentación. Y es que la dieta que seguimos también es esencial a la hora de preguntarnos por qué bajamos o subimos de peso.
- Es cierto que algunos de los genes relacionados con el aumento de peso provocan una predisposición hacia los alimentos poco saludables.
- Por ello, hay que seguir cierta disciplina y adquirir hábitos saludables que permitan sortear los efectos de este gen.
Ten en cuenta que, una vez que comienzas a seguir a una alimentación más sana y fresca, te sentirás mucho mejor. Así, será tu propio organismo el que te pida comer de manera más saludable, puesto que se habituará él mismo a ello.
Una prueba de ello son los protocolos de ayuno intermitente. Estas estrategias dietéticas resultan eficaces a la hora de reducir el peso corporal y de mejorar el estado de salud, de acuerdo con una investigación publicada en la revista Nutrients.
3. El ejercicio
Por supuesto, la cantidad de ejercicio que hacemos es otro de los factores clave a la hora de mantener un peso saludable. Y es que, más allá de la alimentación, otro aspecto que puede ser fundamental a la hora de que algunas personas engordan más que otras.
No obstante, debes tener presente que realizar determinado deporte por sí solo no te ayudará a bajar de peso. Sin embargo, sí puede determinar cuánto aumentas. Debes tener presente que la cantidad de ejercicio que cada uno necesita es diferente.
Y es que, mientras que hay individuos que realizan dos horas de bicicleta para quemar 200 calorías, a otros les basta con media hora para consumir este aporte calórico.
No te premies con caprichos gastronómicos por haber realizado algún ejercicio en concreto, porque esto tampoco será bueno para la salud. Por ejemplo, no es recomendable que, como recompensa por haber realizado suficiente ejercicio, comamos más de la cuenta. De esta forma, lo único que lograremos será que nuestro esfuerzo haya sido en vano y, además, puede acabar provocando que subamos de peso.
4. El estrés y la falta de sueño
Tanto el estrés como la falta de sueño pueden ser un impedimento a la hora de mantener la línea, esto puede ser la respuesta a por qué unas personas engordan más rápido que otras. Ambos aspectos pueden tener un impacto directo en el peso y provocar un aumento del mismo.
Habitualmente, cuando nos encontramos bajo los efectos del estrés tendemos a elegir alimentos poco saludables porque nos gustan más y nos hacen sentir mejor. No obstante, esto es precisamente lo que se ha de evitar para no incurrir en hábitos de vida poco saludables.
Un estudio publicado en la revista Journal of Postgraduate Medicine relaciona de forma directa los conceptos de obesidad y de ansiedad, estableciendo una influencia significativa de uno sobre el otro.
5. Pérdida de la biodiversidad intestinal
Las alteraciones de la microbiota intestinal están asociadas con enfermedades como la obesidad o la diabetes tipo 2. De este modo, la composición y la diversidad de la flora intestinal estarían vinculadas al aumento de peso, no tanto por el número de bacterias que se pierden sino por las que dejan de producirse. Esto puede ser fruto también de una dieta inadecuada o el uso abusivo de antibióticos.
Los hábitos de vida influyen en que unas personas engorden más rápido que otras
Es muy importante que si quieres perder peso, lo hagas siguiendo las indicaciones de un especialista/nutricionista para hacer una dieta en función de los nutrientes que el cuerpo necesita. Ahora bien, sea cual sea la genética o el metabolismo, debes cuidar el cuerpo. Recuerda que existen personas que engordan más rápido que otras, para evitar esta situación es fundamental modificar los hábitos de vida.
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