¿Cómo hacer un trío?

Hacer un trío es la fantasía sexual de muchas personas. Para cumplirla, hay muchos factores emocionales que la pareja debe clarificar primero, si no desean tener problemas luego del encuentro sexual.
¿Cómo hacer un trío?
Isbelia Esther Farías López

Revisado y aprobado por la filósofa Isbelia Esther Farías López.

Última actualización: 06 julio, 2023

Si una pareja decide hacer un trío, es necesario planificar los detalles. Si lo dejan al azar, es muy probable que más que placer ocasione dolores de cabeza. Incluso, muchos noviazgos se han roto por este motivo o entraron en crisis difíciles de solucionar. Deben ser lo más sinceros consigo mismos y con el compañero antes de hacer el llamado esencial.

En la imaginación, hacer un trío es un acto muy erótico y placentero. Ahora bien, en la práctica, si bien es posible que eso sea así, hay que tener en cuenta que en el momento entran en juego otros factores, como la autoestima, los celos y las inseguridades. Por lo tanto, una evaluación previa de las posibilidades es fundamental para no cometer errores y arruinar la relación.

Límites al hacer un trío

En principio, ambos deben estar totalmente seguros de que se trata únicamente de una experiencia sexual. Por ello, es mejor hacerlo con una persona que no conozcan y así, evitar que se involucren los sentimientos. Si llaman a un amigo, las confusiones emocionales aparecerán.

Cuando una pareja decide hacer un trío, acordar los límites es fundamental para evitar que alguno se sienta desplazado o nervioso. Esto marca qué pueden experimentar y qué no con el invitado. Si habrá besos, sexo oral, penetración; todo lo que puedan imaginar debe estar previsto.

Mientras fijan estos contratos, deben visualizar la situación. Tal vez descubran que aún no están listos o quizá noten que son capaces de ir mucho más allá de un beso. Visualizar la situación implica preguntarse si tolerarían ver a su pareja teniendo sexo con otros y si aceptarían ser estimulados sexualmente por personas del mismo sexo.

Para hacer un trío, se requiere que ambos tenga la capacidad de separar los sentimientos del sexo como acto físico. Implica tener la suficiente confianza dentro de la relación como para no caer en los miedos de posibles infidelidades.

Elegir el lugar

El lugar elegido para hacer un trío también tiene su importancia y no debe pasar inadvertido. Lo aconsejable es considerar la posibilidad de hacerlo en una zona neutral. Algunos optan por invitar al tercero a compartir la misma cama que utilizan a diario.

El riesgo es que si algo sale mal, luego lo recordarán cada noche que vayan a descansar. Así, los fantasmas imaginarios se mantendrán presentes en cada nuevo encuentro íntimo.

Elegir entre los dos el lugar en donde harán su trío es un punto importante y no debe pasarse por alto.

Reglas básicas para hacer un trío

Una vez que se ha tomado la decisión y se han organizado todos los detalles del encuentro  sexual, las reglas deben cumplirse tal como fueron previstas. Y existen algunas que son básicas para quienes hacen un trío por primera vez.

1. Generar intimidad

Velas de citronela antimosquitos

Compartir unos minutos antes de pasar al sexo permite relajarse y generar un espacio íntimo. Es una manera menos brusca de pasar de lo convencional a lo desconocido. Pueden comenzar con algunos juegos. También, pueden comunicarle al invitado ciertas pautas que establecieron en pareja.

2. Usar protección

Sea el invitado un conocido o un extraño, los métodos preventivos no pueden faltar. Es la única manera de asegurar que el sexo sea saludable. Cada día más personas padecen de enfermedades de transmisión sexual. Al hacer un trío, la idea es conseguir placer, no problemas. Si el invitado se niega a los cuidados mínimos, hay que desistir y buscar otra persona.

3. Libre de prejuicios

Indefectiblemente uno de los tres se encontrará en un acto sexual con una persona del mismo sexo. Por ello, hay que estar con la mente abierta para encontrarse en esa situación. Los tabúes deben quedar fuera de la habitación si desean ser felices. De lo contrario, serán muy difíciles tanto el “durante” como el “después”.

4. No olvidar a la pareja

Si la acción sube los niveles de excitación y resulta más agradable de lo esperado, la consigna es no olvidarse de la pareja. Ambos están ahí con el objetivo de compartir la experiencia y disfrutar de lo que sucede en la cama.

Por ello, ninguno tiene que quedar desplazado o fuera de juego. Cuando el compañero interviene únicamente como veedor es porque así lo elige, pero nunca porque no encuentra cómo participar.

5. La relación termina en ese instante

Si en medio del encuentro, el invitado desea terminar porque siente que no es lo que imaginaba o la está pasando mal, hay que detener el acto. Tal vez no sea el invitado correcto o no esté preparado para avanzar. La pareja tiene la obligación de comprender y detenerse, ya que obligar a otro a continuar con el trío es más que desfavorable.

Por otro lado, si todos llegaron felices al clímax y están fascinados con el resultado, también debe llegar la hora de que la normalidad retorne. En casa duerme la pareja y nadie más. Por ello, una vez terminado el encuentro sexual, el invitado debe retirarse.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.