¿Cuál es la diferencia entre artritis y artrosis?

Tanto la artritis como la artrosis son enfermedades muy frecuentes, especialmente en mujeres con edades comprendidas entre los cuarenta y los sesenta años.
¿Cuál es la diferencia entre artritis y artrosis?
Alejandro Duarte

Revisado y aprobado por el biotecnólogo Alejandro Duarte.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 julio, 2023

La artritis y la artrosis son enfermedades que afectan a las articulaciones y que pueden ser confundidas por sus características. Sin embargo, existen importantes diferencias entre ambas dolencias.

Mientras que la artritis es una inflamación de las articulaciones caracterizada por dolor e hinchazón y asociada con alguna enfermedad mayor, como la gota o el lupus, la artrosis es una enfermedad crónica degenerativa que se relaciona con la edad. Descubre todo al respecto a continuación.

¿Artritis o artrosis? La artritis reumatoide

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos señala que esta alteración provoca una inflamación de la membrana sinovial, una fina capa que recubre y protege el interior de la cápsula articular fibrosa, además de lubricar y cuidar a las articulaciones de traumatismos.

Es una enfermedad cuyos síntomas pueden aparecer y desaparecer o manifestarse de forma crónica. Además, por lo general es simétrica; es decir que la inflamación aparece en la misma articulación de cada extremo del cuerpo. El trastorno puede desgastar otras estructuras internas cercanas, normalmente huesos y cartílagos.

Actualmente, se desconoce la causa concreta que provoca el desarrollo de la enfermedad. Sin embargo, se han identificado factores de riesgo que aumentarían las probabilidades de padecerla. Entre ellos, algunas enfermedades y la predisposición genética.

También, se ha comprobado que afecta más a las mujeres y que aparece, habitualmente, en la edad mediana aunque afecta de manera primordial a adultos mayores de 64 años.

Lee también: Cura naturalmente la artritis reumatoide y recupera la salud

Síntomas

Mujer con dolor por artritis

El paciente suele presentar unamolestia de intensidad variable en articulaciones pequeñas y medias. Por ejemplo, en las articulaciones que se encuentran en los dedos y las muñecas.

Por tanto, no suele afectar a las rodillas, la cadera, los hombros, etc. En algunos casos clínicos, los sujetos presentaban sequedad en la boca y rigidez en las articulaciones por las mañanas.

Otras señales frecuentes asociadas a esta alteración son el cansancio, la debilidad muscular o la rigidez del cuello. También, se puede sentir un hormigueo en las extremidades y la presencia de pequeños bultos en la piel (nódulos subcutáneos). Si se desarrollan otras complicaciones, el paciente puede padecer otras alteraciones.

Diagnóstico

Dentro del diagnóstico, se puede diferenciar el examen físico y otras pruebas médicas. Por ejemplo, el análisis del líquido sinovial y la obtención de imágenes como la radiografía o la gammagrafía. El equipo médico también puede realizar análisis de sangre y orina para descartar otras patologías.

Tratamiento

Paciente con artritis en rehabilitación

Finalmente, para tratar la afección se suelen combinar las sesiones de fisioterapia y los medicamentos para aliviar los síntomas de la artritis (no llega a curarla). Estos fármacos reducen la inflamación de manera considerable y mejoran la calidad de vida del paciente.

¿Qué es la artrosis?

Se trata de una enfermedad en la que hay una degeneración gradual del cartílago de una articulación. En algunos casos, como explica MedlinePlus, esta estructura elástica y fibrosa puede desaparecer por completo. Por lo general, se sitúa sobre los extremos de los huesos para protegerlos del rozamiento que se produce durante los movimientos.

También se trata de una enfermedad crónica. Podemos, por otra parte, diferenciar entre dos tipos de artrosis:

  • Primaria: no presenta una causa conocida.
  • Secundaria: podemos identificar un desencadenante, por ejemplo, enfermedades congénitas, traumatismos, artritis, la gota etc.

Normalmente, afecta más frecuentemente a las mujeres y a las personas mayores de cincuenta años. Otros factores de riesgo comunes son la obesidad, la menopausia, los antecedentes familiares o realizar actividades repetitivas. Esta condición se da en ciertas modalidades deportivas e, incluso, al mantener una determinada postura al trabajar.

Síntomas

Dolor de rodilla en mujer anciana.
La edad es un factor de riesgo para la artrosis, ya que la degeneración aumenta con los años.

Se puede distinguir una serie de síntomas frecuentes de esta enfermedad. Por ejemplo, dolor que se presenta en el inicio de la enfermedad al realizar cualquier movimiento con esa articulación aunque, luego, aparece también con el reposo en etapas más avanzadas.

También, puede padecerse inflamación, crujidos, rigidez o nódulos subcutáneos. Incluso, puede aparecer una deformación del área afectada que dificulte el movimiento cotidiano.

Normalmente, afecta a ciertas articulaciones. Es el caso de la artrosis de columna vertebral, de las manos, de la cadera o de las rodillas. Ante la sospecha, lo mejor es consultar con el médico.

Diagnóstico

Dentro del diagnóstico, se incluye tanto una revisión física como otros procedimientos médicos. Para concluir la existencia de la enfermedad, se analizan imágenes procedentes de radiografías, ecografías de la articulación en cuestión e, incluso, la resonancia magnética. Además, el equipo médico también puede analizar otras sustancias como la sangre, la orina o el líquido sinovial de la zona afectada.

Tratamiento

El tratamiento para esta dolencia está enfocado en aliviar los síntomas que pueda padecer el paciente y ralentizar, en la medida de lo posible, su evolución; es decir que no existe cura para la artrosis ya que es una enfermedad degenerativa.

Artritis y artrosis, similares pero diferentes

En resumen, artritis y artrosis son dos enfermedades muy frecuentes y crónicas. Ante el menor síntoma, lo adecuado es acudir al médico. Él realizará las pruebas correspondientes y determinará el mejor tratamiento a seguir.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.