Dolor de mandíbula: ¿lo has sufrido alguna vez?

Muchas veces, el dolor de mandíbula puede venir de conductas que llevamos a cabo sin darnos cuenta, como malas posturas, tensiones o nervios. Aprender a manejarlos es fundamental para aliviar este problema.
Dolor de mandíbula: ¿lo has sufrido alguna vez?
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña.

Escrito por Valeria Sabater

Última actualización: 12 julio, 2023

El dolor de mandíbula está descrito como un dolor pulsátil e incómodo que puede variar de leve a intenso, dependiendo de su causa. Aunque muchas veces no tiene su origen en algo grave, es primordial prestarle atención porque puede alertar trastornos como el bruxismo o un problema articular.

En vista de esto, a través de American College of Prosthodontists nos recomiendan consultar a un profesional para obtener un diagnóstico y tratamientos adecuados. En lo posible, debemos evitar automedicarnos, ya que hay ciertas condiciones que, en particular, requieren tratamiento médico.

Dolor de mandíbula: causas que debes tener en cuenta

Chica con dolor de mandíbula.

Debemos tener en cuenta que el dolor de mandíbula puede manifestarse en diversas zonas faciales. Hay quien lo nota más en un oído que en otro. Por el contrario, hay quien sufre más la molestia al comer o al hablar.

Coincidiendo con una publicación en The International Journal of Oral & Maxillofacial Implants, este problema, a veces, está asociado a la región anatómica de la articulación temporomandibular, donde se alberga una compleja red de nervios y estructuras que pueden inflamarse o presentar algunas patologías.

Dolor focalizado en la zona de los oídos

En ocasiones, el sufrimiento del  dolor de mandíbula se centra en alguno de los oídos o incluso en ambos. En este caso, la molestia irradia la zona más alta del rostro, llegando incluso a la cabeza.

Normalmente, este dolor en la articulación aparece cuando hablamos, bostezamos y comemos. En ocasiones, puede confundirse con un simple dolor de muelas pero, en realidad, podemos estar ante un desgaste de la propia articulación temporomandibular.

Asimismo, puede existir algún problema en el disco cartilaginoso de la articulación, en los ligamentos o incluso en los nervios de esta zona. Todos ellos son factores que analizará un especialista. No obstante, hemos de tener en cuenta que el desgaste óseo de esta articulación puede aparecer con la edad.

Cuando no podemos abrir la mandíbula por completo

Si en alguna ocasión has sentido que no podías abrir la mandíbula por completo, párate a pensar cómo era el ritmo de tu vida durante esos días.

No gestionar de manera adecuada el estrés y la presión de nuestro entorno genera una respuesta de “escape” en nuestro cerebro que se traduce en tensión muscular, aceleramiento del corazón y una rigidez corporal que se centra en la zona de los hombros, cuello y cara.

Casi sin darnos cuenta, acabamos tensando la mandíbula, rechinamos los dientes por la noche y aparecen síntomas como el zumbido en los oídos, dolor de cabeza y problemas para abrir o cerrar la mandíbula.

Este problema acaba desapareciendo con el tiempo. Sin embargo, mientras dura, puede llegar a ser muy incapacitante. Como lo sugiere un estudio publicado en Journal of the American Dental Association, el origen puede estar en ese estrés, que debemos aprender a manejar de forma correcta.

También te puede ser útil: Conoce todos los efectos negativos del estrés

El bruxismo

El bruxismo

En más de una ocasión sobre ese problema mandibular asociado a esa conducta que parte de la población tiene por las noches sin darse cuenta: rechinar los dientes.

El bruxismo puede tener como origen una mala alineación de los dientes o incluso un nerviosismo nocturno originado por una dieta inadecuada, la tensión acumulada del día o la incapacidad de disfrutar de un sueño relajante y reparador.

Además, requiere la atención de un profesional, quien nos puede recomendar, por ejemplo, que utilicemos una férula dental para dormir.No obstante, como lo muestra una revisión publicada en The Journal of Indian Prosthodontic Society , el bruxismo es también una de las causas más comunes relacionadas con el dolor de mandíbula.

Echa un ojo a: Bruxismo: un trastorno psicosomático

¿Cómo abordar el dolor en la mandíbula?

Para un adecuado manejo del dolor de mandíbula es primordial contar con el diagnóstico médico u odontológico. Tras una exploración física y pruebas complementarias, el profesional podrá determinar la posible causa del dolor. Posteriormente, puede sugerir la toma de medicamentos u otras medidas terapéuticas.

Los analgésicos de venta libre pueden ser una opción para calmar el dolor. Sin embargo, no deben tomarse en exceso y tampoco remplazan el tratamiento médico. Otras medidas que se pueden tener en cuenta son las siguientes:

Cuida de tu postura cervical

Una forma de reducir los síntomas asociados al trastorno temporomandibular (dolor de mandíbula) es cuidar de nuestra postura. Prestaremos especial atención a la zona de los hombro, cuello y cabeza.

Cuando forzamos la postura aparece la tensión en el cuello y la mandíbula. De hecho, es algo que hacemos sin darnos cuenta cuando trabajamos, vemos la tele o hablamos por teléfono.

Respeta siempre el eje espalda-cuello: deben estar armónicos, rectos y relajados. A su vez, recuerda también que tanto los labios como los dientes deben estar juntos. La lengua, por su parte, ha de estar hacia arriba en tu paladar, respirando siempre por la nariz.

Echa un vistazo a este artículo: Mejora tu postura y alivia el dolor cervical

Presta atención a tu alimentación

Rutinas y buenos hábitos alimentarios
Atender a los alimentos que se consumen es clave para no fomentar daños en las encías, los dientes o la mucosa de la boca.

La alimentación es algo que debemos considerar si queremos tratar el dolor de mandíbula. Así pues, habremos de evitar el consumo de alimentos que tienden a provocar inflamaciones. Entre estos, destacan el azúcar, las grasas, el exceso de café o las bebidas estimulantes con conservantes y azúcares. Por otro lado, es muy aconsejable aumentar el consumo de vitamina C y calcio.

Gestiona tus emociones y combate el estrés

Sabemos que resulta muy fácil recomendar que gestionemos de forma adecuada el estrés. Sin embargo, llevarlo luego a cabo es todo un laberinto de muros y dificultades. Es necesario mentalizarnos de que necesitamos instantes de calma, ya que los nervios y las presiones nos quitan salud y años de vida.

Intenta encontrar momentos a lo largo del día para relajarte. Una buena opción que siempre ayuda para cuidar del cuerpo y la mente es practicar yoga.

El dolor en la mandíbula es un síntoma que no debemos pasar por alto, sobre todo si viene acompañado con otros síntomas. Dado que puede ser signo de algunas enfermedades, es importante solicitar atención profesional. Del diagnóstico dependerá el tratamiento.


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