La difícil realidad de aceptar lo que no puede ser

No vale la pena que estemos perdiendo el tiempo. Hay que aceptar lo que no puede ser lo antes posible.
La difícil realidad de aceptar lo que no puede ser
Bernardo Peña

Revisado y aprobado por el psicólogo Bernardo Peña.

Última actualización: 19 abril, 2021

Aceptar lo que no puede ser es una difícil tarea por diversos motivos, pero no por ello es imposible. Asimismo, debemos tener en cuenta una cosa muy importante: aceptar no significa ser mediocre, conformista o dejarse derrotar. En realidad, aceptar tiene que ver más con la capacidad discernir entre lo que conviene y lo que no, que el hecho de ser derrotado como tal.

Ciertamente, en ocasiones, lo inalcanzable se vuelve algo muy apetecible que deseamos lograr cueste lo que cueste. Pero, ¿nos vale la pena?

A veces, en el camino que nos lleva a conseguir lo que en realidad no podemos, nos dejamos nuestro tiempo e incluso partes de nosotros mismos que nos resultará muy difícil recuperar. Por ejemplo, nuestra autoestima.

Solo podemos ser amigos, aceptar lo que no puede ser

mujer-insistiendo-relacion

Quizás te hayas encontrado alguna vez en la tesitura de enamorarte de alguien que por ti no siente lo mismo. Sin embargo, debido a lo enamorado que te encuentras, has seguido al pie del cañón.

La otra persona ha sido sincera contigo. Te ha expresado lo que siente por ti, te ha dicho que solo podéis ser amigos. Sin embargo, aún mantienes una esperanza que solo estás alimentando tú mismo.

Es posible que en las películas hayas visto relaciones de pareja en las que uno de los miembros no quería nada con el otro en un principio. Algo que te hace considerar que en la vida real esto puede también ocurrir.

No obstante, tu esfuerzo e intentos fallidos pueden hacer que la otra persona termine rehuyéndote e incluso rompiendo la amistad que mantenía contigo. Todo esto porque no has sabido respetar lo que te había dicho.

Durante el proceso de “lucha” que has mantenido te has humillado. Has tenido que aceptar situaciones en las que la persona que te gustaba te hablaba de otras, quizás en un intento de que te quitases de la cabeza la idea de una posible relación.

Tampoco te sentaba muy bien que te dijese repetidas veces que te quería pero solo como amigo. Otra intentona de hacerte abrir los ojos antes de que la relación de amistad se resquebrajase.

Sin embargo, uno solo ve lo que quiere ver y las películas románticas, por alguna razón, no las consideramos ficción como muchas otras. Creemos que todo lo que vemos puede ser posible, algo que muchas veces no es así.

Nuestra relación no va a ninguna parte

Aceptar lo que no puede ser también forma parte de todas aquellas relaciones de pareja que no van a ninguna parte. Puede ser que mantengamos una relación a distancia en la que eso no vaya a cambiar con el tiempo, o una relación en la que no hay amor, ni pasión, ni nada que nos invite a continuar juntos. En estos casos, hay que aceptar lo que no puede ser.

Sin embargo, las creencias sobre el amor nos incitan a luchar, a aguantar y a mantener una relación que se va desgastando por momentos. No vale la pena que estemos perdiendo el tiempo. Hay que aceptar lo que no puede ser lo antes posible.

Soltar y seguir hacia adelante

Soltar y seguir adelante.

Nos cuesta horrores soltar una idea, una relación, una pareja o una ilusión y seguir adelante. Nos aferramos a lo que no puede ser, porque mantenemos una esperanza que se alimenta del aire.

Tendemos no solo a luchar por lo que no puede ser, sino a negarnos a aceptar la realidad tal y como es. De esta manera, nos damos contra una pared una y mil veces, hasta que, por fin, logramos abrir los ojos. Entonces nos daremos cuenta de que debíamos haber soltado nuestras tentativas mucho antes, porque estas no nos llevaban a ninguna parte.

Es normal que nos cueste seguir adelante, pero la vida continúa. Nada se termina con una relación, una persona, ni tampoco con una ilusión. Soltarse supone toda una liberación y nos permite darnos cuenta de los necios que hemos sido al luchar por una causa que estaba perdida desde un principio. Nuestros deseos y anhelos nos hacían ver que había una pizca de esperanza en todo ello.

featured-post url=”https://mejorconsalud.as.com/7-cosas-comun-parejas-felices/”]


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Kernberg, O. F., & Piatigorsky, J. (1995). Relaciones amorosas: normalidad y patología. Paidós.
  • Sánchez Aragón, R. (2009). Expectativas, percepción de estabilidad y estrategias de mantenimiento en las relaciones amorosas. Enseñanza e investigación en psicología14(2).
  • Sánchez, F. L. (2015). Apego y relaciones amorosas. Informació Psicològica, (82), 36-48.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.