Lipoma: todo lo que debes saber

Es fundamental no alertarse confundiendo un lipoma, que es un tumor benigno, con cáncer.
Lipoma: todo lo que debes saber
Maricela Jiménez López

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López.

Última actualización: 06 julio, 2023

Un lipoma es un tumor benigno de carácter blando formado por células de tipo graso provenientes del tejido adiposo. Es común que aparezca en el cuello, los hombros, la espalda y, con menor frecuencia, también en brazos, abdomen y muslos.

Las características de los lipomas son:

  • A diferencia de los tumores malignos, que son firmes al tacto, los lipomas son blandos al tacto.
  • Pueden desplazarse al aplicar presión.
  • Aunque es raro en niños, cualquier persona puede desarrollarlos, siendo más frecuente en poblaciones de entre 40 y 60 años.

Por lo general no son dolorosos y rara vez son perjudiciales.

Causas del lipoma

No hay una edad cerrada para sufrir un lipoma

Las causas exactas por las que se producen los lipomas son desconocidas. Sin embargo, hay algunos factores que aumentan el riesgo de desarrollar un lipoma:
  • Sobrepeso u obesidad.
  • Consumir alcohol en exceso.
  • Historial familiar de desarrollo de lipomas. Sin embargo, este factor solo esta confirmado en el caso de desarrollar lipomatosis, es decir, el desarrollo de múltiples lipomas.
  • Ciertas enfermedades podrían favorecer la aparición de lipomas. Por ejemplo, tener enfermedades de hígado o niveles altos de glucosa en sangre.
  • Golpes o lesiones en la zona, ya que pueden aparecer lipomas en los lugares donde se ha recibido un golpe.

Tipos de lipomas

Podemos distinguir dos tipos principales de lipomas: los simples y los asociados a la lipomatosis.

  • Si se trata de un lipoma aislado, se considera un lipoma simple.
  • Sin embargo, puede darse el caso de desarrollar un lipoma del tipo lipomatosis, es decir, desarrollar varios lipomas en una zona determinada o en distintas partes del cuerpo.

Hay distintos tipos de lipomas dependiendo de la zona del cuerpo en que se encuentren los lipomas. Algunos ejemplos son: lipomatosis neural, lipomatosis pélvica y lipomatosis encefalocutánea.

La lipomatosis puede derivar en una adiposis dolorosa, este tipo es frecuente entre mujeres con sobrepeso y que han pasado la menopausia.

Puede provocar fatiga crónica e hinchazón de la zona afectada. Otro tipo de lipomatosis es la lipomatosis simétrica múltiple. Generalmente, este tipo de lipomatosis afecta a hombres de mediana edad que han consumido alcohol de manera prolongada.

Asimismo, podemos distinguir entre lipomas cutáneos y profundos:

  • Los primeros se encuentran en los tejidos blandos superficiales y suelen localizarse en el cuello, los hombros o la espalda.
  • Los segundos son menos frecuentes y suelen ser más firmes. Este tipo de lipomas puede encontrarse en los pies, las manos o incluso las encías y la lengua.

Síntomas del lipoma

Hombre con lipoma brazo

Debido a que no son dolorosos, sus síntomas suelen pasar desapercibidos. En la mayoría de los casos, un lipoma se descubre cuando el nódulo es palpable. Es decir, el momento en el que el bulto es palpable, redondeado y se mueve al tacto.

Para saber distinguirlos, conviene saber que se encuentran justo debajo de la piel, en zonas como el cuello, los hombros o el abdomen. Generalmente son de tamaño pequeño, de unos 5 centímetros aproximadamente.

Cuando los lipomas producen dolor, este suele ser debido a la presión que se puede estar haciendo sobre un nervio o sobre los vasos sanguíneos, aunque no suele ser lo normal. Esto ocurre cuando los lipomas aumentan de tamaño.

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Diagnóstico del lipoma

Generalmente, para confirmar la presencia de un lipoma no se necesita realizar exámenes especiales, es suficiente con que un dermatólogo examine la zona. Sin embargo, hay distintas pruebas que se pueden realizar para diagnosticarlo:

  • Un examen físico: un médico puede detectar si es un lipoma con el tacto o la vista.
  • Biopsia: esta prueba consiste en extraer una muestra de tejidos del lipoma.
  • Ecografía.
  • El médico también puede hacer preguntas sobre el historial clínico del paciente.

Rara vez se da el caso de que un médico confunda un lipoma con un liposarcoma, es decir, un tumor maligno. Esto se debe a que la palpación es un método de diagnóstico efectivo. Sin embargo, es recomendable realizar una biopsia al bulto una vez que éste sea extraído.

Tratamiento del lipoma

Tratamiento de un lipoma

Debido a que son benignos e indoloros, en general no es necesario eliminar los lipomas. De esta forma, una persona puede hacer vida normal con un lipoma. Sin embargo, en los casos en los que se vuelve doloroso o provoca una incomodidad estética, conviene eliminarlos.

El médico recomendará eliminar el lipoma dependiendo de una serie de factores entre los que se encuentran: los antecedentes familiares y el historial clínico del paciente en relación con el cáncer de piel, si presenta tumores de piel, si el lipoma es doloroso o no y el tamaño del mismo.

Hay tres métodos para eliminar un lipoma:

  • Cirugía: esta es la forma más común de eliminar un lipoma. Consiste en una operación sencilla y corta de carácter ambulatorio mediante la cual se extrae el lipoma.
  • Liposucción: es una intervención en la que se realiza una pequeña incisión en la que se introduce una aguja unida a una jeringa. De esta manera, se succiona el tejido adiposo del lipoma.
  • Inyecciones de esteroides: mediante la inyección de un corticoide en el tejido en torno al lipoma para así reducir su tamaño.

Una vez extraído un lipoma es poco probable que vuelva a aparecer.


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