Metadona: qué es y cómo actúa

El consumo de este opiáceo sin prescripción médica puede conllevar problemas severos como convulsiones o alucinaciones.
Metadona: qué es y cómo actúa
Nelton Abdon Ramos Rojas

Revisado y aprobado por el médico Nelton Abdon Ramos Rojas.

Última actualización: 06 julio, 2023

La metadona es un agonista opiáceo mucho más potente que la morfina pero con propiedades farmacológicas muy similares. Esta droga fue sintetizada en Alemania en la década de 1940.

A día de hoy, la metadona está considerada como un analgésico narcótico sintético. Su consumo causa dependencia física y psicológica, por ello su administración requiere supervisión profesional.  
En sus inicios tenía el objetivo de calmar el dolor. De hecho, en algunas ocasiones se sigue utilizando para el tratamiento de dolor severo. Sin embargo, en la actualidad se utiliza para tratar la adicción a los narcóticos. Sus efectos duran alrededor de 24 horas, por ello se recomienda tomarla una vez al día para desintoxicar.  Veamos más a continuación.

Mecanismo de acción

Mecanismo de acción (2)

La metadona actúa especialmente sobre los receptores de la morfina y la heroína. Sus efectos son los mismos que el resto de los opiáceos:
  • Analgesia.
  • Sedación.
  • Depresión respiratoria.
  • Miosis (contracción permanente de las pupilas).

Los receptores de los opioides están vinculados a proteínas G. Cuando un receptor es estimulado, se produce una inhibición de la actividad de la adenilciclasa. También se reduce la concentración del adenosín monofosfato cíclico (AMPc) y la actividad de la proteinquinasa dependiente de AMPc.  
Por ende, hay una disminución de la fosforilación de proteínas. Además se cierran los canales de calcio en las neuronas presinápticas, por lo tanto la liberación de neurotransmisores es menor.
Al mismo tiempo se abren los canales de potasio de las neuronas postsinápticas, lo que implica  la hiperpolarización de la membrana y la reducción de la activación neuronal.
Al tener un mecanismo de acción muy similar al de la heroína, se emplea en los tratamientos de sustitución de este mismo fármaco. Sin embargo, posee una vida media larga en el cuerpo, lo que ayuda a prevenir los síntomas de la retirada y permite controlar el síntoma de abstinencia.
Cuando un individuo es adicto a la heroína, su sistema inmunitario se ve gravemente afectado. Esto se debe a que hay una disminución en la respuesta fagocitaria y en la proliferación linfocitaria, además de que se reduce la cantidad de linfocitos circulantes. 
Así, hay una pérdida en la inmunocompetencia lo que a su vez aumenta la probabilidad de desarrollar infecciones.

Según la tesis doctoral de María Jesús Escribano: “también se ve parcialmente inhibida la actividad de los linfocitos citolíticos naturales (natural killer cells), capaces de lisar a las células infectadas por virus y células tumorales”.

Farmacología de la metadona

Sin embargo, la metadona no actúa directamente sobre el sistema inmunitario, por lo que después de un tiempo la respuesta inmunitaria se restablece.
El proceso se debe a la sustitución de una sustancia inhibidora de la respuesta inmune —en este caso la heroína— p or otra inmunológicamente neutra, la metadona. De igual manera, se normaliza la función de los linfocitos citolíticos.

Parámetros farmacocinéticos

Parámetros farmacocinéticos
  • Absorción. Se absorbe por medio del tracto gastrointestinal. Una vez que se administra vía intramuscular o subcutánea, la duración es de 4 a 6 horas.
  • Distribución. Se distribuye de forma acelerada por los tejidos hasta unirse con las proteínas plasmáticas.
  • Metabolismo. Mayormente se metaboliza en el hígado.
  • Excreción. Se elimina por filtración glomerular y la reabsorción renal. Particularmente, la reabsorción se ve disminuida al bajar el pH de la orina. Sin embargo, los metabolitos de la metadona también se desechan por las heces.
  • Vida media en el organismo. Entre 15 y 60 horas.

Efectos secundarios de la metadona

Los efectos secundarios de la metadona tienden a ser parecidos a los que causan otros opioides. A menudo incluyen mareos, somnolencia, vómitos y sudoración. Sin embargo, también pueden acarrear otras molestias como:

  • Cefalea.
  • Cólicos.
  • Insomnio.
  • Sequedad bucal.
  • Aumento de peso.
  • Cambios de humor.
  • Dificultades visuales.
  • Dificultades para orinar.

En caso de presentar los siguientes síntomas es indispensable acudir inmediatamente al médico:

  • Vómito.
  • Urticaria.
  • Náuseas.
  • Convulsiones.
  • Alucinaciones.
  • Inflamación en el rostro.
  • Problemas para respirar.
  • Ciclos menstruales irregulares.

Otro efecto secundario que es importante mencionar de manera especial es que se puede convertir en una droga de abuso. Tan solo en Estados Unidos, el número de muertes por envenenamiento de metadona fue de 4418 para el año 2011, según indica  El Sistema Nacional de Estadísticas Vitales de los Estados Unidos.

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Contraindicaciones de la metadona

Alcohol en el sistema nervioso central causa bradipnea.
El alcohol es un depresor de la respiración por su acción en el sistema nervioso central.
  • Alcoholismo.
  • Presión arterial.
  • Problemas de asma.
  • Insuficiencia respiratoria aguda.
  • Hipersensibilidad a la metadona.
  • Enfermedad pulmonar obstructiva severa.

Interacciones

  • Beber alcohol y consumir metadona aumenta el efecto sedativo. Por ende, no se recomienda en absoluto el consumo de alcohol en ningún caso. Al contrario, re recomienda eliminarlo cuanto antes.
  • Al ingerir otros agonistas o antagonistas, se bloquean los receptores.
  • No se debe tomar con la monoaminooxidasa porque afecta el sistema nervioso central.
  • Si se ingieren analgésicos o antitusivos puede ocurrir depresión respiratoria.
  • En caso de tomar antidepresivos hay un aumento en la depresión central.
  • Además, los medicamentos antidiarreicos aumentan la posibilidad de costipación severa.

En cualquier caso, recomendamos consultar con un médico ante cualquier duda acerca del mecanismo de acción y las indicaciones de este analgésico.


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