Miel para bajar de peso: ¿mito o realidad?

Si queremos perder peso es muy importante que prescindamos del azúcar refinado y lo sustituyamos por miel. Un vaso de agua con miel y canela en ayunas también nos ayudará a conseguirlo.
Miel para bajar de peso: ¿mito o realidad?
Carlos Fabián Avila

Revisado y aprobado por el médico Carlos Fabián Avila.

Escrito por Okairy Zuñiga

Última actualización: 09 julio, 2023

Aunque muchos no lo crean, es posible usar la miel para bajar de peso. Si bien se suele recomendar reducir al máximo los azúcares, reemplazar el azúcar refinado por la miel puede ayudar a conseguir el objetivo sin renunciar al sabor dulce.

Para aprovechar los beneficios de la miel, lo más recomendable es acudir a un nutricionista. De esta manera, el profesional podrá diseñar un plan de alimentación adecuado, en el que la cantidad de miel a consumir no represente un posible aumento de peso, sino más bien una ayuda para bajar esos kilos de más y ganar salud.

Ventajas de la miel sobre el azúcar

La miel tiene más calorías que el azúcar (21 contra 16 por cucharadita), pero como también es más dulce, necesitamos consumir menos cantidad. Por eso, al final terminamos ingiriendo menos calorías.

A diferencia del azúcar, la miel es muy nutritiva, pues aporta vitaminas, sales minerales, aminoácidos y antioxidantes. Estos últimos ayudan a disminuir el estrés oxidativo, regular el sueño, y, en cierta medida, prevenir diversos problemas de salud, como algunas enfermedades respiratorias leves. Así lo evidencia una investigación publicada en Pharmacognosy Research.

Además, hay varios estudios que relacionan el consumo de miel y el buen descanso con la pérdida de peso, por lo que también resultaría una gran aliada en este aspecto.

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Fuente de energía

La miel se absorbe más lentamente que el azúcar, por lo que es ideal para deportistas, ya que les aporta energía de manera más sostenida. Se recomienda tomarla en cantidades moderadas después de entrenar, para que ayude a regular los niveles de glucosa.

Además, tomar un poco de miel reducirá la sensación de apetito y el deseo de consumir otros alimentos ricos en grasas y azúcares, que sería mucho más perjudicial para la salud.

De acuerdo con un artículo publicado en la Fundación Española del Corazón, la miel “es un alimento ideal para aquellas personas anémicas o convalecientes que necesitan una ayuda extra para recobrar la vitalidad. A su vez, ayuda al organismo a restablecer su ritmo de actividad habitual“.

Miel para bajar de peso: un complemento aprovechable

Por sí sola, la miel no adelgaza, pero según varios estudios, tiene la capacidad de regular y reducir la glucosa, así como el colesterol. Esto, junto a una dieta equilibrada y algo de deporte, sí que podría ayudarnos a perder peso.

Una manera deliciosa de tomar la miel es beber agua con canela y una cucharada de miel en ayunas. También puedes optar por comer una manzana en rebanadas acompañada media cucharadita de miel como postre. Y si quieres un desayuno energético, prepara avena natural con leche y miel.

Comer miel es beneficioso, pero siempre dentro de una dieta equilibrada para bajar de peso

Más allá del uso de la miel, la pérdida de peso requerirá del planteamiento de una dieta saludable y equilibrada. De este modo se podrán reducir las calorías diarias introducidas por medio de la alimentación, lo que generará un desequilibrio en la balanza energética a favor del gasto.

Desayunos y cenas: 5 claves para perder peso

Es recomendable priorizar la ingesta de alimentos frescos frente al consumo de ultraprocesados. Estos últimos productos destacan por su contenido en azúcares y en grasas trans capaces de empeorar el estado de salud y de incrementar la ganancia de peso graso. Al mismo tiempo contienen aditivos químicos que pueden condicionar el funcionamiento de determinadas rutas fisiológicas.

Valora también la inclusión de algún protocolo dietético para estimular la oxidación de las grasas. En este sentido, los ayuno intermitentes han demostrado varios beneficios. Además de promocionar la pérdida de peso, consiguen estimular la reproducción mitocondrial y la eficiencia del organismo, mejorando así la salud a medio plazo.

De todos modos, es preciso que cuentes con asesoramiento profesional antes de lanzarte a experimentar una de estas alternativas. Así podrás asegurarte de su seguridad y de que la estás realizando de manera adecuada.

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Para bajar de peso, come sano y haz ejercicio

Además, de la dieta, es necesario realizar actividad física de manera regular para conseguir materializar la pérdida de peso y la oxidación de las grasas. En este sentido, lo más aconsejado es realizar actividades de fuerza, ya que de este modo se incrementa la cantidad de masa muscular y, con ello, el gasto metabólico basal.

Los ejercicios de carácter interválico también resultan eficaces para estimular la oxidación de las grasas. Incluso el deporte de resistencia en ayunas tiene grandes beneficios desde este punto de vista. Alternar todas estas modalidades conseguirá mejorar la composición corporal en un corto espacio de tiempo.

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La miel puede ayudar a perder peso

A pesar de que de por si la miel no es capaz de estimular la pérdida de peso, es posible introducirla en una dieta con este objetivo. Es cuestión de manejar bien las cantidades ingeridas y el momento en el cual se consume, para maximizar los beneficios del aporte de azúcares simples. Recuerda que para que estos nutrientes no perjudiquen a la salud han de introducirse en un contexto deportivo, y en pequeñas cantidades.

No te olvides de la importancia de llevar a cabo una dieta saludable. Esta ha de ser equilibrada y variada. Además, es fundamental priorizar el consumo de alimentos frescos frente al de ultraprocesados y otros comestibles industriales. Dichos productos son capaces de emperorar el estado de salud y de promocionar la ganancia de peso a partir de los azúcares simples y de las grasas trans que contienen.


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