Postparto en verano, ¿cómo llevarlo?

El postparto en verano puede tener varias ventajas, ya que es un buen momento para despejarse y disfrutar con la familia la llegada del bebé. Sin embargo, hay que tomar algunas precauciones. ¿Qué debes saber?

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 25 mayo, 2023

El postparto en verano es una situación que incomoda a muchas mujeres durante el embarazo. La preocupación por cómo sobrellevar el calor y la recuperación en esta época asalta a todas aquellas que dan a luz durante los meses estivales.

Sin embargo, el postparto en verano tiene muchas más ventajas de las que, a priori, se imagina la mayoría. A continuación, te explicamos algunos consejos para afrontarlo de la mejora manera posible. Verás que no es tan difícil ni tan malo como imaginas.

¿Qué ventajas tiene el postparto en verano?

Todos sabemos que el verano es tiempo de vacaciones para la mayoría de la gente. Casi todos los trabajadores suelen disponer de un pequeño descanso y los niños y jóvenes no tienen que ir al colegio ni al instituto. Piénsalo: toda tu familia y tus amigos tendrán más tiempo para ayudarte y disfrutar del bebé.

Además, el buen tiempo ayuda a salir de casa, ya sea a pasear o a despejarse. Puedes elegir las horas más frescas del día para salir con tu bebé. En esta época el estrés de la gente se reduce y disfrutar de la tranquilidad se hace más asequible.

¿Qué consejos debes seguir para el postparto en verano?

Para que no haya inconvenientes durante el postparto en verano, es conveniente seguir una serie de recomendaciones que resultan claves para el bienestar. A continuación, las mencionamos en detalle.

1. Cuida la alimentación

Lo ideal para el postparto en verano es realizar comidas ligeras. En realidad, llevar una dieta sana debe ser esencial para cualquier época del año. Sin embargo, durante el embarazo o el postparto, es aún más importante. En este momento tienes más riesgo de sufrir deshidratación o golpes de calor.

Se recomienda hacer cinco comidas ligeras diarias. Además, seguro que has notado que en esta época te aumentan las ganas de comer fruta y verdura. Haz caso a tu cuerpo y basa tus comidas en torno a estos alimentos. Te ayudarán a mantenerte hidratada, combatirán el estreñimiento y, además, te proporcionarán las vitaminas que necesitas.

También es importante que bebas suficiente agua, alrededor de 1,5 y 2 litros al día. Del mismo modo, tienes que evitar la exposición solar entre las 12 y las 4 de la tarde. Llevar ropa fresca podrá ayudarte a protegerte de esos golpes de calor.

Si bien es posible que quieras eliminar todos los kilos que ganaste durante el embarazo, es importante que lo hagas después del periodo postparto. Durante los primeros meses, las madres deben consumir una cantidad elevada de calorías con la finalidad de producir leche materna con la cantidad adecuada de nutrientes para el bebé.

2. No temas a la lactancia

Amamantar a un bebé es algo natural y fisiológico. De hecho, lo ideal es mantener una lactancia materna exclusiva los primeros 6 meses de vida. No debes tener problema en hacerlo en público. No obstante, si sientes vergüenza, prueba a llevar camisetas que sean fáciles de levantar. Así te sentirás menos expuesta.

Además, es normal que sientas sed y que sudes mientras lo haces. Bebe agua mientras el bebé mama y trata de colocar una gasa bajo su cabeza para absorber un poco el sudor.

3. Presta atención a la higiene

Tras el parto, puedes notar cierto flujo vaginal sanguinolento que puede llegar a durar hasta un mes. Este flujo se denomina loquios. Presentan un olor característico que, al combinarlo con el sudor por el calor, puede ser desagradable. Lo ideal es usar compresas postparto para contener los loquios y evitar a toda costa los tampones o las copas menstruales.

No obstante, tal y como señala este estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de México, los loquios tienen un olor parecido al del flujo menstrual, pero un olor fétido podría indicar que hay algún tipo de infección, por lo que hay que estar pendiente de ello.

Además, si te practicaron una incisión para facilitar el parto, debes cuidar la cicatriz. Lo mejor es hacerlo con agua y jabón neutro. Es importante evitar la humedad en la zona, para que no se ablande. Una buena idea es dejar la herida al aire el mayor tiempo posible, sin bragas ni compresas, para evitar el exceso de humedad.

En caso de haber tenido una cesárea, se debe evitar la acumulación de humedad en la zona producto del sudor y seguir las recomendaciones del especialista. Lo ideal es usar productos antisépticos que no tengan yodo y acudir al médico en caso de notar alguna alteración.

Por otra parte, en el postparto en verano, los sofocos típicos y las sudoraciones pueden hacerse más notables. Se cree que se deben a los cambios hormonales y a la lactancia aunque, por el momento, como señala este artículo publicado en The New England Journal of Medicine , son necesarias más investigaciones el respecto. No obstante, l as duchas pueden ayudarte a aliviarlos.

De hecho, debes saber que puedes ducharte al día siguiente del parto. Lo que se deben evitar son los baños, las piscinas y el mar. Esto se debe a que el cuello del útero tarda un cierto tiempo en volver a su posición original, por lo que el agua puede entrar a través de él y causar infecciones.

4. Trata de posponer los viajes en el postparto en verano

No es un problema grave el viajar con un bebé. Sin embargo, se recomienda esperar al menos dos semanas tras el parto para viajar, ya que puede ser incómodo tanto para la madre como para el bebé. Lo ideal es que, si viajas, vayas a un lugar que tenga buena atención médica.

5. Consejos para el calor

El postparto en verano se acompaña de un calor que, en algunos lugares, puede llegar a resultar asfixiante. Hay ciertas medidas que pueden ayudarte a enfrentarlo. En primer lugar, trata de cerrar las persianas y las ventanas para que no entre el calor a la habitación.

Si dispones de aire acondicionado o ventiladores, puedes utilizarlos. Lo mejor es que evites que se dirijan directamente al bebé. Trata de refrigerar la habitación una hora antes de entrar a dormir y evita usarlos durante el sueño.

Como hemos dicho antes, utilizar ropa cómoda, fresca, holgada y de fibras naturales es esencial. También tienes que intentar realizar los paseos en las horas más frescas del día para evitar el calor.

6. Evita la exposición prolongada al sol

El verano es la época ideal para ir a la playa, la piscina o simplemente hacer alguna actividad al aire libre, incluso durante el postparto. Sin embargo, el embarazo puede generar la aparición de ciertas manchas en la cara llamadas cloasmas, las cuales se deben a los cambios hormonales.

La exposición al sol puede oscurecer aún más los cloasmas, lo que dificulta su eliminación. En este sentido, se recomienda usar siempre protector solar. Además, es importante evitar exponerse al sol entre las 11:00 am y las 4:00 pm, ya que durante ese periodo existe mayor radiación UV.

7. Mejora la circulación en tus piernas

El embarazo puede generar múltiples problemas circulatorios o empeorar las patologías existentes. Por ello, una de las mejores recomendaciones para tener un postparto en verano es mejorar la circulación en las piernas con ejercicios en casa.

La mayoría de los ejercicios no requieren mayor esfuerzo físico y los puedes realizar acostada en la cama. Hacer círculos con los tobillos, moverlos a los lados o hacia arriba y abajo ayudará a contraer los músculos de las piernas y mejorar el flujo sanguíneo.

El postparto en verano no debe ser un problema

En definitiva, dar a luz es un momento maravilloso y el postparto en verano no tiene por qué resultar ningún problema. No te preocupes y afronta el calor con estos sencillos consejos que, seguro, te serán útiles.