Purinas: todo lo que tienes que saber

Cuando ingerimos alimentos muy ricos en purinas, la cantidad de ácido úrico aumenta. Si se acumula, este ácido úrico puede producir diferentes patologías, como la gota.
Purinas: todo lo que tienes que saber
Leonardo Biolatto

Revisado y aprobado por el médico Leonardo Biolatto.

Escrito por Leonardo Biolatto

Última actualización: 06 julio, 2023

Gran parte de las personas conocen las purinas debido a su relación con la patología de la gota. Sin embargo, pocos saben la importancia real de estas moléculas y cuál es su papel en el organismo. Son uno de los compuestos que forman parte del grupo de los elementos fundamentales del ácido desoxirribonucleico (ADN).

Las purinas son un tipo de bases nitrogenadas, que son lo que acabamos de denominar como elemento fundamental para formar el ADN. Se encuentran, por tanto, en nuestras células y en los alimentos que ingerimos. Por ejemplo, la carne.

Además, siguen un ciclo propio de descomposición y eliminación en nuestro organismo. Este proceso es determinante, ya que cuando se descomponen forman el ácido úrico. Si este no se elimina correctamente puede provocar gota.

Dentro del grupo de las purinas encontramos dos tipos básicos: la adenina y la guanina. En este artículo explicaremos para qué sirven las purinas y cuál es su relevancia en el organismo.

¿Qué son las purinas?

Como ya hemos mencionado, las purinas son una familia de moléculas. Son compuestos químicos que forman parte del ADN y de otras moléculas como el ácido ribonucleico (ARN). Dentro de esta familia encontramos dos importantes: la adenina y la guanina.

Como forman parte del ADN, es lógico que las encontramos de manera normal en nuestro organismo. De hecho, nuestro cuerpo puede fabricarlas. Además, ciertos alimentos como la carne o el pescado son muy ricos en purinas.

Las purinas intervienen en muchos procesos del metabolismo celular y también en la síntesis de proteínas. Existen numerosos trastornos que alteran el ciclo normal de estas sustancias. Por ejemplo, cuando se afecta su eliminación se producen las patologías relacionadas con el ácido úrico, como la gota.

Sin embargo, la gota no es la única enfermedad importante vinculada con las purinas, aunque sea la más frecuente. Existen muchos trastornos que afectan a su degradación, y que pueden ser más graves que la gota.

gota por exceso de ácido úrico y purinas
La gota es la enfermedad más vinculada a las purinas, pero no la única

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¿Qué relación tienen con el ácido úrico?

Las purinas, cuando se degradan en nuestros tejidos, dan lugar al ácido úrico. Esta degradación se produce principalmente en el hígado y el intestino delgado. La cantidad de ácido úrico que se produce varía según diferentes factores.

Lo que más influye, generalmente, es la dieta. Esto es así porque los alimentos son una de las fuentes más importantes de purinas. Casi todo el ácido úrico se elimina por la orina, aunque una parte también se excreta por el intestino.

Cuando se produce mucho ácido úrico, o no se puede eliminar correctamente, este se acumula en el cuerpo. Si esto ocurre se deposita en los tejidos en forma de tofos. Sobre todo, lo hace en las articulaciones causando artritis. Esta concentración alta de ácido úrico también puede provocar problemas renales.

La gota es una forma de artritis que tiene su explicación en las purinas. Afecta principalmente a la articulación del dedo gordo del pie. Causa ataques de dolor muy intensos, además de enrojecimiento e hinchazón de esa zona.

Los tofos son acumulaciones muy evidentes de ácido úrico en las articulaciones

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¿Qué relevancia tienen las purinas en la dieta?

Como ya hemos mencionado, los alimentos son la principal fuente de purinas. Esto hace que la dieta se convierta en un factor determinante en el desarrollo y el control de las enfermedades causadas por ácido úrico.

Aunque lo ideal es que todos llevemos una dieta equilibrada y sana, para las personas que tienen una predisposición a sufrir estas patologías es especialmente relevante controlar la comida. Algunos de los alimentos ricos en purinas son:

  • La carne en general, ya sea de vaca, cerdo, animales de caza o aves.
  • El marisco, como la langosta o los mejillones.
  • El hígado, las mollejas o los riñones de cualquier animal.
  • Pescado como el salmón ahumado o los boquerones.

Cuando hay un problema con el metabolismo de las purinas, se recomienda evitar estos alimentos. Además, es importante beber mucho líquido para aumentar la eliminación de ácido úrico. También se recomienda mantener un peso adecuado y evitar el alcohol.

Para tener en cuenta

No obstante todas estas recomendaciones que te contamos en el artículo, siempre debe primar la consulta médica. Lo que hay que destacar es que las purinas son esenciales para nuestra vida, pero también pueden relacionarse con diferentes enfermedades. La gota es el trastorno más conocido, y la artritis que genera es muy dolorosa. De allí la importancia de estar atentos para detectarla.


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