Puede deberse a un resfriado, a la sinusitis o a las alergias. Lo cierto es que tener la nariz tapada no es para nada agradable, sobre todo si no estamos acostumbrados a respirar por la boca, algo que, además, no se aconseja. En este artículo, encontrarás algunos remedios caseros para destapar la nariz.
Causas de la congestión nasal
En primer lugar, es necesario saber que las respuestas alérgicas tapan la nariz. Puede ser que tu organismo establezca esa barrera ante el polvo, el polen, los aerosoles, el humo del cigarrillo, etc. Esta respuesta del sistema inmune hace que las membranas mucosas se inflamen.
Asimismo, los cambios repentinos de temperatura también pueden causar congestión en la nariz, sobre todo si se pasa de caliente a frío. Por ejemplo, como ocurre cuando, en invierno, pasamos de un ambiente calefaccionado a estar en la calle y sin bufanda.
La rinitis no alérgica es otra de las causas; es una inflamación de las mucosas y los conductos nasales. Los síntomas son secreción y obstrucción nasal, picazón y estornudos. Puede volverse recurrente o no mejorar con el tiempo.
Por otra parte, cuando tenemos una gripe o un resfriado común, sin dudas terminaremos con la nariz tapada. Esto se debe a que la infección viral se aloja en el sistema respiratorio, en el tracto superior; en ese caso, la respuesta es la misma que ante una alergia.
Otra razón por la que se puede tapar la nariz es si hay infección bacteriana en los senos paranasales. Esto puede ocurrir principalmente por las noches, y luego de un resfriado. Del mismo modo, tener el tabique desviado también puede causar congestión nasal; puede darse en una o en las dos fosas nasales.
Por último, consumir ciertos medicamentos pueden causar taponamiento en la nariz. Sobre todo aquellos fármacos que afectan la circulación de la sangre y causan inflamación en la membrana mucosa nasal.
Estas son algunas sugerencias para combatir este incómodo estado. Recuerda que, pese a que pueden resultar efectivas, no sustituyen las indicaciones específicas que te haya dado el médico:
No te suenes la nariz: Esto solo empeora la situación. Además, nada de pañuelos; úsalos únicamente cuando sientas que hay secreción desde tu nariz. Si te suenas fuerte y muchas veces, tus membranas nasales se inflamarán todavía más; se forma una especie de círculo vicioso.
Utiliza una solución salina con un aerosol: Se puede comprar en la farmacia. Su uso es muy sencillo: en el baño, inclina la cabeza sobre el lavabo, rocía la solución en una de tus fosas nasales y deja que drene bien; repite tres veces al día.
Puedes utilizar el vapor de la ducha para aliviar la congestión nasal: la humedad y la temperatura elevada disminuirán la inflamación y podrás respirar mejor. Puedes también hervir agua y sal en un cazo y aspirar los vapores, tapando la cabeza con una toalla. Además, no dudes en comprar un vaporizador o humidificador para los ambientes muy secos y para mejorar la respiración cuando duermes.
Mantenerte hidratado: Esto es vital porque el líquido hará que la mucosidad disminuya y facilitará también su expulsión. El agua adicional en tu cuerpo evitará los bloqueos nasales o los conductos irritados. Puedes tomar también caldo, té o infusiones.
Coloca una compresa tibia en la nariz: Acuéstate boca arriba y moja un paño con agua lo más caliente que puedas soportar. Luego, ponlo alrededor de la nariz y vuelve a mojarlo cuando se enfríe. Si no quieres dormir, puedes recostarte en el sillón y aprovechar para mirar televisión o leer. A la noche, no dudes en dormir boca arriba y, en lo posible, con más almohadas para que la cabeza esté elevada.
Utiliza tiras adhesivas para la nariz: Se consiguen en la farmacia y son bastante económicas. Se pueden usar en cualquier momento del día, aunque generalmente se colocan en la noche; su uso evitará que ronques o te sofoques.
Come alimentos picantes, como el chile, o bien condimentados: Una salsa de tomate con comino te puede ayudar; recuerda beber una buena cantidad de agua durante la comida.
Remedios caseros para la nariz tapada
Además de los consejos que explicamos antes, puedes valerte de los siguientes ingredientes naturales para ayudarte a destapar tu nariz:
Mastica tres o cuatro hojas de albahaca antes de desayunar y antes de acostarte. También puedes beber té de albahaca. Todavía faltan investigaciones que confirmen este efecto de la albahaca, de todas maneras.
Consume dos cucharadas de miel regularmente para aliviar la tos producida por los mocos que ocasionan la nariz tapada. Disuélvela en un vaso de agua tibia y bebe antes de dormir para mejores resultados.
Se cree que el vinagre de manzana también puede ayudarte a mejorar la congestión nasal, pero no existen estudios que avalen esta creencia. Si aún así deseas probar, mezcla dos cucharadas en un vaso de agua tibia y bebe hasta 4 veces al día. No dudes en aliñar tus ensaladas con el vinagre.
Disuelve una cucharadita de jengibre fresco rallado en agua tibia, añade zumo de limón y miel —para que tenga mejor sabor— y bebe antes de acostarte. Sus efectos no están comprobados, ya que hay muchas supuestas propiedades del jengibre que todavía resta confirmar.
El aceite de mostaza es muy bueno para este problema; solo tienes que colocar una gota en cada fosa nasal. También puedes usarlo para preparar tus alimentos. También hacen falta más estudios para confirmar esta propiedad, ya que algunos confirman otras, pero no precisamente la de descongestionar.
El aceite esencial de eucalipto no deberá faltar en tu casa si sueles tener muchos episodios de nariz tapada al año. Hierve un cazo con agua y añade 10 gotas de este aceite; después, inhala sus vapores.
Prepara una mezcla con dos cucharadas de zumo de limón, ¼ cucharadita de pimienta negra en polvo y una pizca de sal. Aplica en las fosas nasales para aliviar la congestión.
Coloca una cebolla partida por la mitad —o en cuatro partes— en la mesita de noche. Su aroma llegará directamente a las fosas nasales; es también un antibiótico natural, gracias a sus propiedades antinflamatorias.
Con estas claves y remedios naturales, podrás mejorar el problema cotidiano de la nariz tapada. Por supuesto, si los síntomas son demasiado intensos o generan mucha molestia, consulta con tu médico para un análisis profesional.
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Riera Sampol, A., & Pedro Gómez, J. E. de. (2014). ¿ En la congestión nasal en pacientes pediátricos, es más efectivo realizar lavados nasales o aspiración para la prevención de complicaciones ? Evidentia: Revista de Enfermería Basada En La Evidencia, 11(47), 18.
