Remedios herbales para combatir la infección por Helicobacter pylori

La presencia de H. pylori se puede detectar mediante pruebas del aliento y análisis de muestras de heces. Ahora bien, el tratamiento de los síntomas debe pautarlo el médico.
Remedios herbales para combatir la infección por Helicobacter pylori
Maricela Jiménez López

Revisado y aprobado por la médico Maricela Jiménez López.

Escrito por Solimar Cedeño

Última actualización: 06 julio, 2023

Según los datos del Manual MSD, la infección por Helicobacter pylori es la causa más frecuente de gastritis y de úlcera gastroduodenal (úlcera péptica) en todo el mundo, en personas mayores (después de los 60 años).

¿Tienes dolores estomacales en la parte superior del abdomen, malestar estomacal, indigestión y otras molestias? Esto podría estar siendo causado por la bacteria Helicobacter pylori (H. pylori) en tu organismo. Esta bacteria se aloja en la mucosa estomacal, daña el tejido estomacal y duodenal y causa inflamación.

El 50 % de la población mundial padece de enfermedades estomacales a causa de la H. pylori, lo que la convierte en la infección más común en los seres humanos.

¿Cómo se transmite la Helicobacter pylori?

Las posibles vías de transmisión de una persona infectada a otra son la saliva, la materia fecal y los instrumentos médicos infectados con ella.

Las personas infectadas pueden tener la bacteria en la placa dental, por lo que se transmite a través de la saliva al hacer contacto con personas sanas.

También se encuentra en la materia fecal y, si esta no tiene una higiene adecuada, puede contaminar alimentos y agua para el consumo humano. Por eso siempre se recomienda lavar muy bien los alimentos y filtrar el agua.

Los instrumentos médicos como las sondas nasogástricas infectadas también son un medio de transporte para la bacteria.

Lee también: Tratamiento de la gastritis

Enfermedades o manifestaciones estomacales causadas por la bacteria

Mujer con dolor de estómago por una infección de Helicobacter Pylori

Son muchos los problemas que puede provocar la infección por Helicobacter pylori. Entre ellos podemos destacar los siguientes:
  • Gastritis crónica.
  • Linfoma gástrico.
  • Dispepsia o mala digestión.
  • Úlceras pépticas duodenales y gástricas, entre otros.

Remedios herbales para combatir la infección por Helicobacter pylori

Según la sabiduría popular, los siguientes remedios a base de plantas y hierbas pueden ayudar a aliviar algunos síntomas causados por la H. pylori en el organismo.

1. Infusión de jengibre

El jengibre es una raíz recomendada para tratar afecciones estomacales como la gastritis. Tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y bactericidas. Además, se dice que actúa como un buen antiácido.

Ingredientes

  • 2 tazas de agua (500 ml).
  • 2 cucharadas de jengibre, cortado en trozos pequeños (30 g).

Preparación

  • Hierve medio litro de agua y agrégale los trocitos de jengibre.
  • Déjalo al fuego por unos minutos, luego apágalo y deja reposar la infusión.
  • No beber más de 2 tazas al día.

2. Infusión de romero

Los mejores remedios caseros naturales para mejorar la circulación.

El romero es una planta aromática a la cual se le atribuyen varias propiedades medicinales. Las infusiones de romero serían entonces adecuadas para aliviar las molestias leves del aparato digestivo, ya que mejora el proceso de digestión y elimina los gases.

Ingredientes

  • 2 tazas de agua (500 ml).
  • 2 cucharadas de hojas de romero (30 g).

Preparación

  • Hierve el agua en una olla y, cuando llegue al punto de ebullición, agrégale las hojas romero.
  • Déjalo en el fuego por 4 minutos, retira las hojas.
  • Bebe con moderación.

3. Té de cúrcuma y jengibre

Como la cúrcuma contiene sustancias antioxidantes y se le atribuyen propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, se cree que su consumo puede ayudar a reducir la inflamación del estómago y a equilibrar la flora intestinal. Además, estimula los jugos gástricos, disminuye flatulencias y protege la mucosa estomacal. No obstante, no se recomienda su consumo en exceso.

El jengibre, como ya hemos visto, tiene muchas propiedades beneficiosas que complementarán las de la cúrcuma.

Ingredientes

  • Miel (al gusto).
  • Jengibre (al gusto).
  • 1 taza de agua (250 ml).
  • 1 pizca de polvo de cúrcuma.

Preparación

  • Hierve el agua en una olla y agrégale la pizca de cúrcuma y el jengibre.
  • Déjalo hervir por unos minutos y luego agrega la miel para endulzar.
  • Retira la olla del fuego y deja reposar el té. Finalmente cuélalo y consume.

4. Aceite esencial de hierbaluisa

En el ámbito popular, se dice que la hierbaluisa es una de las mejores plantas para combatir la infección por Helicobacter pylori. Hasta ahora, la bacteria no ha mostrado resistencia a los componentes de la planta.

Ingredientes

  • 1 taza de agua (250 ml).
  • 20 o 30 gotas de aceite esencial de hierbaluisa.

Preparación

  • Diluir 20 o 30 gotas del aceite en la taza de agua.
  • Puedes tomar esta bebida después de cada comida.
  • También puedes hacer una infusión con hojas de hierba luisa.
  • Consume con moderación.
Té de hierbaluisa.

Antes de tomar un remedio casero, consulta con el médico

Antes de iniciar un tratamiento a base de plantas medicinales (infusiones, etcétera) es importante consultar con el médico tratante. Hay que tener en cuenta que, para que los tratamientos fitoterápicos resulten útiles, es imprescindible seguir las indicaciones del profesional. Además, hay que recordar que hay plantas, hierbas, especias y afines que están contraindicadas en algunos casos.
Los remedios caseros NO sustituyen el tratamiento que pueda pautar el médico. En todo caso, lo más recomendable es consumirlos a modo de tratamiento coadyuvante (siempre y cuando el profesional sanitario así lo autorice).


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.