¿Los remedios naturales ayudan a combatir el cáncer de ovario?
El cáncer de ovario es una enfermedad que suele presentarse en mujeres mayores de 40 años de edad. Según datos de Instituto de Técnicas Avanzadas Contra el Cáncer (ITACC), el 50 % de los casos se produce en mujeres mayores de 63 años, aunque se esta enfermedad también puede afectar a mujeres jóvenes.
Además de la edad, entre los principales factores de riesgo destacan: la obesidad, la ausencia de embarazos completos, la nuliparidad y los antecedentes familiares.
De acuerdo a los expertos de la Sociedad Española de Oncología Médica “existen algunos estudios que indican que una dieta rica en grasa y la exposición al talco son factores de riesgo, sin embargo no se dispone de estudios concluyentes”.
Acerca del tratamiento del cáncer de ovario
En lo que respecta al tratamiento del cáncer de ovario, este viene a ser multidisciplinar. Al respecto, los expertos de la SEOM indican que generalmente consiste en la combinación de cirugía (extirpación quirúrgica del tumor existente visible), seguido de quimioterapia. Además de terapia hormonal, radioterapia y tratamiento sobre dianas biológicas.
Sin embargo, todo depende del caso. Hay que tener en cuenta variables como: el estado de salud de la paciente, el tipo de tumor, su extensión, entre otros aspectos.
Cabe destacar que cuando la enfermedad se detecta en etapas iniciales, el pronóstico suele ser positivo.
Ahora bien, ¿los remedios naturales pueden contribuir con el tratamiento pautado por el médico? ¿Son una opción recomendable? Veámoslo a continuación.
La realidad acerca del uso de remedios naturales para tratar el cáncer de ovario
Los profesionales de la salud y los expertos en Dieta y Nutrición ─como Julio Basulto y Juanjo Cáceres, autores de Dieta y cáncer─ afirman que NO existe ningún alimento, bebida o dieta anticancerígena. Aún cuando se haya indagado acerca del potencial de un determinado compuesto de un alimento, la evidencia hallada ha permitido comprobar que el cáncer no puede tratarse, prevenirse o curarse mediante el consumo regular de un alimento o bebida en concreto. No obstante sí que recomiendan mantener una dieta equilibrada, en la que se le dé prioridad a los alimentos frescos y menos cabida a los ultraprocesados.
Por otra parte, los expertos de la AECC aclaran que los remedios naturales no son recomendables dado que carecen de base científica y eficacia. Por lo tanto, no se debe recurrir a ellos. Se suele creer que son inofensivos, pero en realidad pueden causar interacciones, interferir con el tratamiento pautado por el médico y perjudicar al paciente.
Así que, para el tratamiento del cáncer de ovario los remedios naturales no son una opción adecuada.
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1. Setas shiitake
A pesar de que por su valor nutricional se hayan llevado a cabo varias investigaciones con el fin de determinar si alguno de sus componentes podría contribuir con el tratamiento del cáncer de ovario (y otros tipos), la evidencia hallada no resultó concluyente. Además, los estudios fueron realizados en ratones. Por lo tanto, la comunidad científica no avala el consumo de setas shiitake como medida para curar o tratar el cáncer.
Las setas shiitake contienen beta-glucano, una molécula a la cual se le atribuyeron propiedades anticancerígenas in vitro.
2. Soja y derivados
Aunque la soja sea rica en proteínas y otros nutrientes y sea recomendable incluirla en una dieta equilibrada para mantener la salud, no existe evidencia que permita recomendar su consumo como tratamiento coadyuvante para el cáncer u otras enfermedades.
En un estudio, se evaluó el potencial de las isoflavonas que contiene la soja para reducir el riesgo de padecer cáncer de mama. Sin embargo, los investigadores concluyeron que era necesario seguir profundizando al respecto. Por lo tanto, aún no existe evidencia que indique el consumo de soja es determinante en la prevención o tratamiento de esta enfermedad. De momento, solo se puede tener en cuenta como comlemento a una alimentación balanceada.
3. El pescado azul
El pescado azul es, sin duda alguna, una de las principales fuentes de ácidos grasos omega-3 que existe, por lo que es recomendable su consumo dentro de una dieta equilibrada para gozar de buena salud.
En un estudio, se evaluó su potencial para ayudar a prevenir el cáncer de próstata, mama y colon y se determinó que, aunque los AGPICL puedan tener un rol protector respecto al cáncer, principalmente por las propiedades inflamatorias que poseen, la evidencia indica que el consumo de pescado azul, por sí solo, no es suficiente para prevenir o tratar enfermedades como el cáncer de ovario (u otros tipos).
El tratamiento médico es lo más adecuado
Una vez más, aclaramos que no existe ningún alimento capaz de prevenir, tratar o curar el cáncer y que los remedios naturales no son una opción válida porque pueden interferir en el tratamiento pautado por médico.
Por último, es importante señalar que, una vez finalizado el tratamiento pautado por el médico, las pacientes deben acudir periódicamente a consulta para realizarse chequeos. Estos ayudan a realizar un seguimiento de su estado de salud y a controlar los efectos secundarios que puedan presentar.
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