Remedios para los forúnculos crónicos
Un forúnculo es una inflamación de la piel causada por la infección de un folículo piloso y el tejido subcutáneo circundante, normalmente por la bacteria Staphylococcus aureus. En ocasiones, varios forúnculos se unen formando una lesión más extensa, en cuyo caso la aflicción se conoce como forunculosis o ántrax.
La buena noticia es que puedes tomar medidas en casa para obtener el alivio en caso de que tengas forúnculos pequeños. Una de ellas consiste en la aplicación de compresas tibias para aliviar el dolor y promover el drenaje de la zona, de manera natural.
En el caso de forúnculos más grandes y ántrax, será necesario un tratamiento médico. Este puede incluir lo siguiente:
- Incisión y drenaje. El médico puede drenar un forúnculo grande o ántrax mediante una pequeña incisión en la punta. Las infecciones profundas que no se pueden drenar por completo se pueden llenar con gaza estéril para ayudar a absorber y quitar el pus adicional.
- Antibióticos. A veces, el médico puede recetarte determinados medicamentos antibióticos para ayudar a curar las infecciones graves o recurrentes.
Bajo ninguna circunstancia se debe recurrir a la automedicación, puesto que supone un riesgo mayor de sufrir reacciones adversas.
¿Existen remedios para los forúnculos crónicos?
Para los forúnculos pequeños remedios existen remedios (o medidas caseras) que pueden ser útiles a la hora de obtener alivio. Por ejemplo, la aplicación de compresas calientes ya mencionada.
Hay quienes preparan las compresas calientes con manzanilla (o bien su infusión o su aceite esencial), a fin de potenciar su acción antiinflamatoria y analgésica. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el alivio viene dado principalmente por el calor, no por el uso de la manzanilla en sí.
En un estudio realizado en roedores se pudo observar que la manzanilla (y específicamente la especie Chamaemelum nobile L.) es útil para promover la curación de heridas. Tiene efecto antiinflamatorio, cicatrizante y antibacteriano. Por ello, se podría considerar el uso de este aceite como coadyuvante en algunos problemas de la piel, incluyendo los forúnculos.
Las compresas se aplican sobre el área afectada uno 10 minutos aproximadamente, y luego, si se desea, se repite el procedimiento. Llegado a este punto, es importante recordar la importancia de mantener una higiene adecuada, tanto de las manos y la piel afectada como de los implementos a utilizar.
Otras medidas que debes tener presente:
- Lávate las manos (con agua y jabón) antes y después de aplicarte las compresas y tener contacto con el área afectada.
- Desinfecta las compresas después de usarlas. Si son de tela, puedes hervirlas en agua.
- No intentes manipular el forúnculo para exprimirlo o quitártelo, pues al hacerlo podrías propagar la infección a otras áreas del cuerpo y empeorar el problema.
- Presta atención a tu ropa, sábanas y toallas. Si han tenido contacto con los forúnculos, debes lavarlos como corresponde para evitar que la infección sea recurrente.
- En caso de cualquier duda, consulta con el dermatólogo.
Descubre: Té de manzanilla: propiedades y beneficios
Cuidar la alimentación es una forma de tratar los forúnculos en casa
Una buena alimentación siempre es necesaria para gozar de buena salud, incluso a la hora de prevenir o tratar cuestiones como los forúnculos.
Una dieta basada en un consumo excesivo de azúcar, chatarra, frituras, ultraprocesados y comestibles sin ningún aporte nutricional no proporciona a la piel lo que necesita para estar sana, entre otras cuestiones.
Por otra parte, se han relacionado los problemas de azúcar en la sangre con la aparición de forúnculos. Por ello, no está de más hacerse un chequeo completo para indagar si podría haber una diabetes encubierta detrás de los forúnculos.
De acuerdo con los resultados del chequeo, el médico recomendará mejorar los hábitos alimenticios y aprovechar el consumo de fuentes con nutrientes concretos.
Nutrientes básicos para tener una piel sana
Para mantener una piel sana y bonita, es importante darle prioridad a los alimentos frescos y las fuentes de grasas saludables, como el pescado azul y el aguacate.
En este orden de ideas, existe la hipótesis de que, para combatir los forúnculos debemos procurar tener bajo control los niveles de azúcar en la sangre, y evitar los déficits de nutrientes.
Se puede consultar con el médico si sería conveniente tomar suplementos de:
No obstante, no hay que olvidar que, antes que tomar cualquier suplemento, lo ideal es integrar al a dieta los alimentos que proporcionan esos nutrientes necesarios para la salud de la piel y el resto del organismo. Por ejemplo, podemos consumir más:
- Fuentes de vitamina C a través de cítricos, frutos rojos, piña, kiwi, acerola, pimiento rojo.
- Vitamina E a través de aguacate, aceite de oliva de primera presión, almendras, nueces, semillas, vegetales de hoja verde
- Zinc a través de pescado, ostras, huevo, carne de cordero, marisco, germen de trigo, polen.
A la par de todo esto, una vez más resaltamos la importancia de no recurrir a la automedicación ni a medidas de manipulación de los forúnculos que impliquen cortes en los mismos y afines. Esto podría causar complicaciones y extender la infección a otras áreas de la piel.
Por ello, lo mejor es consultar siempre con el médico de cabecera o el dermatólogo antes de tomar cualquier acción.