Todo lo que tienes que saber sobre la alimentación macrobiótica

La alimentación macrobiótica es más un estilo de vida que un régimen alimentario, que se basa en los principios taoístas de yin y yang. Basada en la armonía de los alimentos, aquí te explicamos sus pasos y recomendaciones.
Todo lo que tienes que saber sobre la alimentación macrobiótica
Sergio Alonso Castrillejo

Revisado y aprobado por el farmacéutico Sergio Alonso Castrillejo.

Última actualización: 09 julio, 2023

¿Sabías que la alimentación macrobiótica proviene de la tradición oriental del yin-yang? ¿Quieres descubrir cómo puede influir en tu equilibrio físico y mental?

La alimentación macrobiótica procede de Japón y deriva de los principios filosóficos del taoísmo. En este artículo te explicaremos en qué consiste.

Principios universales

Los principios de la alimentación macrobiótica se remontan al taoísmo.

La alimentación macrobiótica se basa en el equilibrio entre el yin y el yang, los principios femenino y masculino, respectivamente, que rigen la vida en la tradición filosófica oriental. Juntos, estos dos principios establecen la unión del uno o del todo.

Estas dos ideas de la filosofía taoísta manifiestan la perenne dualidad de todo lo que existe en el universo. Al mismo tiempo, representan energías contrapuestas que se complementan. En macrobiótica, el equilibrio entre el yin y el yang define la relación entre los tipos de alimentos, los utensilios que usamos para cocinarlos y los platos en los que los servimos.

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Origen de la alimentación macrobiótica

El japonés George Ohsawa fue quien acuñó el término “alimentación macrobiótica”. La dieta se popularizó en los años 30 del siglo pasado en Europa, y más tarde se difundió a EEUU en los años 50.

Ohsawa creía que ingerir los alimentos en una proporción ideal de yin y yang de 5 a 1 permite que el cuerpo se armonice físicamente y mentalmente. Según la tradición macrobiótica, si el cuerpo se encuentra en armonía puede percibir la realidad de forma mucho más clara.

¿En qué consiste?

La alimentación macrobiótica original consistía en 5 dietas principales con distintas proporciones de alimentos yin y yang, ordenadas de mayor a menor contenido de proteína animal. Pero con el tiempo fue evolucionando hasta convertirse en una dieta vegetariana con planteamientos menos radicales, en el contexto de un estilo de vida armónico y saludable.

La alimentación macrobiótica se basa en alimentos ecológicos y de proximidad. La componen sobre todo hortalizas de temporada, ricas en carbohidratos complejos. También incluye una cantidad importante de cereales, y la única proteína animal permitida es el pescado, dependiendo del tipo de dieta macrobiótica que sigas.

Los macronutrientes se distribuyen aproximadamente de la siguiente forma:

  • 40-60%: cereales integrales como arroz, cebada, avena y trigo sarraceno.
  • 20-30%: frutas y verduras.
  • 10-25%: legumbres y derivados, como tofu, miso y temph. También vegetales marinos, como las algas.

Algunas personas incluyen pequeñas cantidades de verduras fermentadas, nueces, semillas, y de vez en cuando pescado.

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Recomendaciones generales de la dieta macrobiótica

 

La alimentación macrobiótica mantiene en armonía la proporción de los alimentos.

La macrobiótica recomienda seguir estas pautas de alimentación:

  • Solo comer y beber cuando se sienta hambre y sed, respectivamente.
  • Masticar muy bien los alimentos antes de tragarlos.
  • Para cocinar y almacenar los alimentos, utilizar materiales como madera, vidrio y porcelana.
  • Evitar los hornos microondas y las hornillas eléctricas.
  • Purificar el agua antes de beberla o cocinar con ella.
  • No ingerir bebidas alcohólicas, azucaradas ni con cafeína.

Beneficios para la salud

En general, se puede afirmar que la alimentación macrobiótica es más un estilo de vida equilibrado que una dieta. Llevar una dieta macrobiótica bien planificada es beneficioso para la salud, como lo es cualquier dieta que aumente la cantidad de vegetales y reduzca al mínimo los alimentos procesados.

Algunos seguidores de esta filosofía aseguran que sus propiedades pueden funcionar en el tratamiento del cáncer. Sin embargo, la agencia Cancer Research de Reino Unido establece que no existe prueba alguna de que cure el cáncer, e incluso previene sobre sus posibles efectos dañinos.

Por otro lado, existen estudios que indican que la dieta tiene un efecto positivo sobre la salud en general y en el tratamiento de la diabetes de tipo II en particular.

¿Alternativa saludable?

Platos de comida haciendo una flor.
La variedad de la alimentación macrobiótica la hace muy beneficiosa para la salud.

Si tienes deficiencias nutricionales, una dieta macrobiótica restrictiva mal planificada o basada solamente en cereales integrales es peligrosa. Consulta con un nutricionista antes de comenzar con un régimen alimentario.


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